Feliz año.
Nunca fue fácil enfrentarse a lo frágil: pero aquí estamos.
Larga es la historia, corta la conclusión: cada vez menos pelos en la lengua, más en el corazón.
Todo el mundo quiere ser inmortal, pero nadie se ha molestado en leer la letra pequeña: para ser inmortal
Pájaro nunca voló: le dijeron que no podría y se lo creyó.
La procesión va por dentro, no por teatro.
Dejaremos de complicarnos la vida sin sentido el día que nos llamen simple y nos parezca un cumplido.
Hijo, he aquí un hallazgo que te recomiendo no pasar de larg… ni olvidar: los humanos son bien lentos en dar… mas raudos cual rayo en recibir.
Llevan las medias negro melancolía: como el corazón.
Querido, “hubos” hubo muchos pero no fueron tuyos. Pero “ahoras” sólo hay uno y te pertenece.
Viaja ligero si quieres llegar lejos: la felicidad.
¿Qué se supone que debe uno pensar si cuesta más leer y aprender de los fallos de los demás que beber y cometer los propios?
No te preocupes, deja que la vida ocurra como ocurre la vida misma: orgánicamente.
Los que más nos esforzamos en esto del vivir, te lo digo como si pudiera verlo, hemos visto a alguien dejar de hacerlo.
No hay momento más letal que cuando la tóxica quemazón de la decepción se te hace familiar.
Humano guarda secreto de sumario: llora por dentro.