Fe.
Algunos se van a desilusionar, otros pensarán que es mentira, cuando les diga que lo que tiene valor en la vida no se puede patentar.
Las aceras siguen siendo ilegibles libros de pies cuyas páginas se revuelven al son del insomnio
¿Qué se supone que debe uno pensar si cuesta más leer y aprender de los fallos de los demás que beber y cometer los propios?
No se echa en falta nada que sobra: como una mariposa que vuela a la pata coja.
No sé a quién busco aquí, Padre: si lo estoy buscando a Él o me estoy buscando a mí.
Los ojos de Ella eran de esos que parecían poseer un pedacito de infinito
Quien no tiene memoria necesita cicatrices. Quien no tiene historia necesita tatuajes.
Déjame que te cuente el lado oscuro del mercado: venderse a uno mismo está muy bien pagado.
La débil dedicatoria que le dedico… para hacerlos míos se está desdibujando entre ojeras desgastadas y lírica… y se está volviendo ilegible
La procesión va por dentro, no por teatro.
Irrelevante: cuando nadas en el mar, la lluvia da igual.
Cantar bajo la lluvia está sobrevalorado. Yo prefiero ser lluvia bailando en tu ventana: cantando en claqué
Vamos con prisa para llegar más rápido a ninguna parte.
Desde pequeñito crecí igualito que un camaleón: un ojo en el presente –que es buen… otro en el pasado –que fue mejor–.
Nunca fue fácil enfrentarse a lo frágil: pero aquí estamos.