El bus veinte va como si no quisiera llegar al final.
Sin publicidad, sé una buena persona: he aquí el secreto.
Larga es la historia, corta la conclusión: cada vez menos pelos en la lengua, más en el corazón.
Mientras tanto, el eco de aquel beso inesperado resonaba en mi cabeza.
Mientras tanto, la gente intenta descubrir una forma de cubrir su carne desnuda que no se diluya
Todos los días sonrío, o es que no lo ves: unos días al derecho, otros al revés.
La procesión va por dentro, no por teatro.
Sol, gracias por levantarte todos los días e iluminar a los habitantes de la Tierra: ingratas hormigas que van a la car…
Mientras el otoño llega y las hojas se tornan amarillo, yo me torno carajillo y me bebo,
Hazlo o no lo hagas: no hay propósito alguno que te haga triunfar.
El mundo es infinitamente complejo… hay infinitos matices entre el bien y el mal, así como infinitos tonos entre el blanco y el negro.
Del maestro más mordaz, siempre somos aprendiz: las lecciones vitales siempre dejan cicatriz.
Tu sonrisa es un soplo de aire fresco. Un pliegue de origami que desorienta.
En efecto, yo –como cualquier elemento– lluevo lo que llevo por dentro. De hecho,
Llevan las medias negro melancolía: como el corazón.