Tus demonios internos se van a eternizar hasta que veas, que para vencerlos, los hay que abrazar.
Mi abuela solía decir: “Gato escaldado del agua fría escapa”. A mí me gusta añadir: “Humano escaldado
La atracción de la luna siempre me pareció aterradoramente atractiva: como una buena mujer.
Fuimos los perfectos políglotas: yo te hablaba en cristiano, tú me callabas en francés.
No te dejes engañar: las sonrisas de verdad pueden atravesar hasta las mascarillas más opacas.
¿Sin ganas de vivir? Vive sin ganas. Las ganas de vivir se ganan viviendo.
El prosaico patriotismo de la pila de platos sucios de la cocina no está patrocinado por ninguna puta compañía
Tu sonrisa es un soplo de aire fresco. Un pliegue de origami que desorienta.
Irrelevante: cuando nadas en el mar, la lluvia da igual.
Vístete fuego, viste té y hierba en el pelo: arriba el cielo, abajo el trigo
Uno mendiga, muchos mirando el móvil: falta compasión.
Pájaro nunca voló: le dijeron que no podría y se lo creyó.
No se echa en falta nada que sobra: como una mariposa que vuela a la pata coja.
Mientras tanto, la gente intenta descubrir una forma de cubrir su carne desnuda que no se diluya
Al final podré perecer petrificado por perder un pulso de miradas