Soy una sombra de mí mismo
que se desvanece
en la luz del otro.
Sin embargo todos le hablan
a eso que no soy.
Grito al vacío inerte, colmado
de los silencios de la gente.
No hay movimiento que atente
Contra el ser una presencia
Que no pasa de la carencia
De sentido, de poder...
El destino de toda sombra es desaparecer,
fundirse con la oscuridad
cuando ésta deviene.
Cansado de tanto intento
Rígido en el fluir del silencio
Abandonado al próximo encuentro
Existo como esqueleto que espera
Florecer.