Gabriela Mistral, seudónimo de Lucila Godoy Alcayaga, (Vicuña, 7 de abril de 1889-Nueva York, 10 de enero de 1957) fue una poetisa, diplomática, profesora y pedagoga chilena. Por su trabajo poético, recibió el Premio Nobel de Literatura en 1945. Fue la primera mujer iberoamericanan y la segunda persona latinoamericanan en recibir un Premio Nobel. Carta a Gabriela por Juana de Ibarbourou, 1957 ¿Por qué caminos del alba andas descubriendo el cielo ese, prometido a unos los que sufrimos, creemos y le pedimos a Dios ir a bruñir sus luceros ? ¿Por qué sendas, asombrada, ya vas encontrando el cielo, mientras aquí las banderas y pueblos, están de duelo.? ¿Por qué te fuiste, tan pronto precipitando el invierno cuando aún, lleno de flores, se desgranaba febrero? Yucas y conquistadores te irán formando cortejo; Pizarro barbado y noble —bronce, plata, encaje, acero— con una ciudad de torres entre sus brazos sin huesos. Y una muchedumbre oscura que va detrás de Atahualpa te sigue cantando himnos en lengua quechua y aymara. Ya estás, Gabriela, en la gloria, mitad de princesa incaica, mitad de reina española, como Isabel, la magnánima. Ya sé que no has de escribir a nadie mas en la tierra, que oficinas de correo a la eternidad se veda. ¡Pero es tan dulce que sepas Gabriela, que toda América por ti está tan conmovida como tu patria chilena...! El cielo junto al copihue la orquídea venezolana se une a la victoria-regia del Brasil, y en la sabana de Colombia, los gomeros detienen su savia trágica. ¡Toda la flora de América quiere mirarte la cara! Asómate entre las nubes una tarde arrebolada; muéstranos tu frente ancha de madre tan bien amada, ¡déjanos poquito a poco, del todo no te nos vayas! Aquí ha quedado tu verso, tu palabra estructurada con lo mejor del idioma y lo mejor de tu alma. Pero nos falta tu rostro con la sonrisa cansada, que a todos nos descansaba cuando nos daba en los ojos. Oye, Gabriela, las voces desde tu «bosque perfecto» damos la señal que diga que llega a ti nuestro acento, y repasa, tu que tanto sobre la tierra anduviste, ¡reposa y se haga radiante su risa aquella, tan triste! Descubre el cielo y descansa, pero, Gabriela ¡no olvides!
Dulce María Loynaz Muñoz (La Habana, Cuba; 10 de diciembre de 1902-Ibidem; 27 de abril de 1997) fue una escritora cubana, considerada una de las principales figuras de la literatura cubana y universal. Obtuvo el Premio Miguel de Cervantes en 1992. Publicó sus primeros poemas en La Nación, en 1920, año en que también visitó los Estados Unidos. A partir de esa fecha realizó numerosos viajes por Norteamérica y casi toda Europa, incluyendo visitas a Turquía, Siria, Libia, Palestina y Egipto. Visitó México en 1937, varios países de Sudamérica entre 1946 y 1947 y las Islas Canarias en 1947 y 1951, donde fue declarada hija adoptiva.
Gloria Fuertes (Madrid, 28 de julio de 1917 – Madrid, 27 de noviembre de 1998) fue una poetisa española. Nació en Lavapiés, en la época, un modesto barrio del Madrid antiguo. Su madre era costurera y sirvienta; su padre, bedel. Poco se sabe de su vida familiar, a lo que ha contribuido que la escritora siempre guardara celosamente su intimidad. Se ha especulado sobre su homosexualidad, que aparecería sutilmente declarada en poemas como «Lo que me enerva», «Me siento abierta a todo», «A Jenny», etc. Dice Gloria Fuertes: Sale caro, señores, ser poeta. La gente va y se acuesta tan tranquila que después del trabajo da buen sueño−. Trabajo como esclavo llego a casa, me siento ante la mesa sin cocina, me pongo a meditar lo que sucede. La duda me acribilla todo espanta; comienzo a ser comida por las sombras las horas se me pasan sin bostezo el dormir se me asusta se me huye −escribiendo me da la madrugada−. Y luego los amigos me organizan recitales, a los que acudo y leo como tonta, y la gente no sabe de esto nada. Que me dejo la linfa en lo que escribo, me caigo de la rama de la rima asalto las trincheras de la angustia que nombran su héroe los fantasmas, me cuesta respirar cuando termino. Sale caro señores ser poeta.
Flora Alejandra Pizarnik (Avellaneda, 29 de abril de 1936 – Buenos Aires, 25 de septiembre de 1972) fue una poetisa, ensayista y traductora argentina. Estudió filosofía y Letras en la Universidad de Buenos Aires y pintura con Juan Batlle Planas. Entre 1960 y 1964, Pizarnik vivió en París, donde trabajó para la revista Cuadernos y algunas editoriales francesas, publicó poemas y críticas en varios diarios y tradujo a Antonin Artaud, Henri Michaux, Aimé Césaire e Yves Bonnefoy. Además, estudió historia de la religión y literatura francesa en La Sorbona. Tras su retorno a Buenos Aires, Pizarnik publicó tres de sus principales volúmenes: Los trabajos y las noches, Extracción de la piedra de locura y El infierno musical, así como su trabajo en prosa La condesa sangrienta.
Carolina Coronado Romero de Tejada (Almendralejo, Badajoz, 12 de diciembre de 1820 - Lisboa, 15 de enero de 1911, enterrada en el Cementerio de Badajoz), escritora española, considerada como la equivalente extremeña de otras autoras románticas coetáneas como Rosalía de Castro, y autora de tal notoriedad que llegaría a ser calificada con el título de "El Bécquer femenino". Fue tía de Ramón Gómez de la Serna. Nació en el seno de una familia acomodada de Almendralejo (Badajoz), pero de ideología progresista, lo que provocó que su padre y su abuelo fueran perseguidos. Tras mudarse a la capital de provincia, Badajoz, Carolina sería educada de la forma tradicional para las niñas de la época: costura, labores del hogar... pese a lo cual, ya desde pequeña mostró su interés por la literatura, y comienza a leer, robando horas al sueño, cualquier género u obra que puede conseguir.
Juana Fernández Morales, cuyo seudónimo era Juana de Ibarbourou, conocida popularmente como Juana de América, (8 de marzo de 1892, Melo - 15 de julio de 1979, Montevideo), fue una poetisa uruguaya. El 10 de agosto de 1929 recibió, en el Salón de los Pasos Perdidos del Palacio Legislativo, el título de «Juana de América» de la mano de Juan Zorrilla de San Martín y una multitud de poetas y personalidades. Fue enterrada con honores de Ministro de Estado en el panteón de su familia del Cementerio del Buceo.
Gioconda Belli, Managua, 9 de diciembre de 1948, es una poetisa y novelista nicaragüense que goza de amplio reconocimiento internacional. Junto a Ernesto Cardenal y Claribel Alegría, inició la renovación de la poesía en su país. Un marcado acento erótico impregna buena parte de su obra, aunque la última producción denota una gran preocupación por los cambios políticos de su patria.
Rosalía de Castro (Santiago de Compostela, 24 de febrero de 1837 — Padrón, 15 de julio de 1885) fue una poetisa y novelista española que escribió tanto en lengua gallega como en lengua española. Considerada en la actualidad como un ente indispensable en el panorama literario del siglo XIX, representa junto con Eduardo Pondal y Curros Enríquez una de las figuras emblemáticas del Rexurdimento gallego, no sólo por su aportación literaria en general y por el hecho de que sus Cantares Gallegos sean entendidos como la primera gran obra de la literatura gallega contemporánea, sino por el proceso de sacralización al que fue sometida y que acabó por convertirla en encarnación y símbolo del pueblo gallego. Además, es considerada junto con Gustavo Adolfo Bécquer, como la precursora de la poesía española moderna.
Rosario Castellanos Figueroa (Ciudad de México, 25 de mayo de 1925 - Tel Aviv, 7 de agosto de 1974) fue una escritora, periodista y diplomática mexicana, considerada una de las literatas mexicanas más importantes del siglo XX. ...si es necesaria una definición para el papel de identidad, apunte que soy una mujer de buenas intenciones y que he pavimentado un camino directo y fácil al infierno. –Rosario Castellanos
Idea Vilariño (Montevideo, 18 de agosto de 1920 - 28 de abril de 2009) poeta, ensayista y crítica literaria uruguaya perteneciente al grupo de escritores denominado Generación del 45. Dentro de sus facetas menos conocidas se encuentran la de traductora, compositora y docente. Nació en una familia de clase media y culta, en la que estaban presentes música y literatura. Su padre, Leandro Vilariño (1892-1944) fue un poeta conocido. Al igual que sus hermanos Numen, Poema, Azul y Alma, estudió música. Su madre conocía muy bien la literatura europea.
Juana Inés de Asbaje y Ramírez de Santillana, más conocida como Sor Juana Inés de la Cruz, (San Miguel Nepantla, 12 de noviembre de 1651—Ciudad de México, 17 de abril de 1695) fue una religiosa y escritora novohispana del Barroco en el Siglo de Oro. Cultivó la lírica, el auto sacramental y el teatro, así como la prosa. Por la importancia de su obra, recibió los sobrenombres de «el fénix de América», «la Décima Musa» o «la Décima Musa mexicana». A muy temprana edad aprendió a leer y a escribir. Perteneció a la corte de Antonio de Toledo y Salazar, marqués de Mancera y 25° virrey novohispano. En 1667 ingresó a la vida religiosa a fin de consagrarse por completo a la literatura. Sus más importantes mecenas fueron los marqueses de la Laguna, virreyes de la Nueva España, quienes publicaron sus obras en la España peninsular. Murió a causa de una epidemia el 17 de abril de 1695.
Alfonsina Storni Martignoni (Sala Capriasca, Suiza, 29 de mayo de 1892 – Mar del Plata, Argentina, 25 de octubre de 1938) fue una poetisa y escritora argentina del modernismo. Su prosa es feminista y, según la crítica, posee una originalidad que cambió el sentido de las letras de Latinoamérica. En su poesía deja de lado el erotismo y aborda el tema desde un punto de vista más abstracto y reflexivo. Sus composiciones reflejan, además, la enfermedad que padeció durante gran parte de su vida y muestran la espera del punto final de su vida, expresándolo mediante el dolor, el miedo y otros sentimientos desmotivacionales.
Carilda Oliver Labra. Poetisa cubana, Premio Nacional de Literatura (1998), nacida el 6 de julio de 1922 en la occidental provincia de Matanzas, específicamente en la capital provincial, ciudad en la que siempre ha vivido. Graduada de Derecho en la Universidad de La Habana en 1945, profesión que ha ejercido en su ciudad natal junto a su pasión por la poesía. Carilda Oliver: “He sido muy feliz siendo poeta” En el programa "Con 2 que se quieran”, 4 enero 2011. Amaury Pérez: Muy buenas noches, estamos en Con 2 que se quieran, ahora aquí en 5ta. Avenida y calle 32, en el barrio de Miramar, en los maravillosos Estudios Abdala. Una noche verdaderamente especial. Durante todos estos programas que han transcurrido hasta este momento, ustedes la pidieron, ustedes la solicitaron mediante sus correos, mediante sus cartas. Es la persona que más han solicitado. Yo lo he ido apuntando y así es y aquí está. Los ojos más bellos de la literatura cubana: una mujer extraordinariamente hermosa, una escritora de excelencia. Para cualquiera es emotivo presentarla, tenerla delante. Una mujer que irradia dulzura y ternura, la eminente poetisa cubana, matancera Carilda Oliver Labra. Señora, un beso, otro beso. Muchas gracias, yo estoy abrumado por su presencia, usted ha venido de Matanzas a estar aquí con nosotros y yo no puedo menos que rendirme a sus pies y agradecérselo. Y empezaremos nuestra conversación, más que una entrevista. Usted es Premio Nacional de Literatura. La pregunta sería. ¿Llegó a tiempo el Premio Nacional de Literatura? Carilda. Claro que te voy contestar y te voy a tratar de tú. Aunque no hemos tenido mucha oportunidad de vernos personalmente, pero te he visto en escena, en televisión, y en sueños… Amaury. Ay, Dios mío… Carilda. Primero, tengo que agradecerte la invitación. Amaury. Gracias, muchas gracias. Carilda. Después, todas esas cosas lindísimas que has dicho y en el transcurso del programa creo que se podrá ir haciendo presente esa admiración que es mutua. Amaury. Ah, muchas gracias. Carilda. Y que hoy para que no parezca esto una asociación de bombos recíprocos no te puedo hablar de tu música ni de tus interpretaciones. Yo creo que tú eres un poeta, lo de músico, ¡figúrate!, pero bueno, vamos a pasar a responder tu pregunta. Que si llegó, si tomó mucho tiempo… eso, en cierto modo, pues no es descorazonador, diríamos, no, no me angustió. Fui candidata 9 veces, o sea, 9 años seguidos, al Premio Nacional de Literatura que es, como todo el mundo sabe, el premio más importante en la carrera de un escritor. Fueron escogiendo los mejores escritores de Cuba, no puedo decir otra cosa, pero bueno, mi turno no llegaba y yo pensaba: bueno, es que yo no soy tan buena, yo no soy tan buena. Además, yo había tenido mis problemas, había estado fuera de las editoriales mucho tiempo, y decía: esto puede ser que influencie, era un tribunal, parece que compasivo, digo yo, también, a lo mejor no era tan justo, pero dirían: esta pobre mujer lleva 9 años esperando seguramente. No, yo ya no esperaba. Amaury. ¿No esperaba nada? Carilda. Cuando me lo dieron, que me llamaron por teléfono para decírmelo. Dije: Esto es una broma, esto es una broma. ¡Pero era verdad! Amaury. ¡Pero era verdad!, ¿y lo disfrutó? Carilda. ¡Ay, cómo no! Lo disfruté muchísimo, lo estoy disfrutando todavía. Sí, sí, porque eso, claro, es un compromiso, es un compromiso histórico y algo que nos obliga a tratar de ser mejores y ya va siendo imposible porque la vida…, con sus añitos… es posible que nos esté haciendo daño. Desde luego, nosotros no nos damos cuenta. Esto es una coquetería, esto es una coquetería. Amaury. Téngala conmigo porque la está teniendo con los televidentes nada más. La veo que mira para la cámara y para la cámara, tiene que hablarme a mí, porque me estoy poniendo celoso. Carilda. Yo coqueteo con los televidentes… (risas) Amaury. (risas) Yo estoy celoso, me estoy poniendo celoso de la cámara. Carilda. No esté celoso, porque más celoso estará mi marido. (risas) Amaury. Ah, sí, seguramente. (risas) Carilda. Y ten cuidado no se cele de ti porque es karateca. (risas) Amaury. ¡No. no, no! Además él sabe que usted es un amor antiguo mío, pero somos amigos, usted lo sabe, Raydel y yo somos amigos, así que no se va a poner celoso conmigo. Ahora, ¿Usted escogió el camino de la poesía, Carilda, o la poesía la escogió a usted? Carilda. Bueno, yo creo que sería presumir mucho por parte mía si digo que yo fui escogida por la poesía. Es presumir mucho. Lo que pasa que de ella no me he podido escapar. He sido muy feliz siendo poeta. No hubiera querido ser nada más. Amo mucho la música, la plástica. He intentado y hasta me he graduado de pintura, pero realmente… el ballet, bueno, el teatro, todas las artes, pero, sinceramente, nací poeta. Y quiero decirlo, porque cuando yo tenía tres o cuatro años, que mi mamá me cantaba canciones, ella me contó mucho tiempo después, que yo le modificaba las canciones. Amaury. ¿Ah, sí? Carilda. La letra. Amaury. La letra, claro. Carilda. Entonces ella dijo: esta niña va a ser poeta y parece que resultó. Claro, la poesía es muy difícil y me parece a mí, que aparte del don que se pueda traer, hay que estudiar y tiene mucho que ver con la técnica y con la inspiración. Amaury. Ahí vamos, porque hay gente que dice que no hace falta… que la inspiración no existe. Carilda. ¡Pero imagínate!, si no existiera la inspiración, si fuera una cosa de aprender lo que es un endecasílabo, lo que es una cesura, lo que es un hemistiquio, lo que es un soneto, lo que es un verso libre, pues sería, vaya, un objetivo de cualquier persona. Amaury. Cualquier persona se aprende la técnica y ya es poeta. Carilda. Claro y yo creo que…, claro, se pueden hacer versos, pero una cosa es un verso y otra cosa es la poesía, ¿eh?. El verso es la línea, el fondo, la forma, diría, la forma. Pero tú puedes aprender…, bueno, vamos a hacer octosílabos. Me voy a leer a Martí, que era magnífico poeta y que además en los octosílabos, sí, era un príncipe y ya, voy cogiendo esa música, que la rima y el ritmo, pero si se te fue la chispa, que es el fuego, es más que el fuego, la luz del verso, no puedes hacer poesía. Bueno, no es una lección, es una idea muy humilde. Amaury. Bueno, es humilde pero está viniendo de Carilda Oliver. No me lo está diciendo cualquiera. Carilda. Además, no creo que sea una idea mía, yo creo que todos los que escribimos sabemos. Hay veces que uno hace cosas que rompen. Que las miras después y en todo…, uno puede escribir un poema breve de cinco o seis o siete versos y tener un solo verso, y si merece la pena lo dejamos porque es imposible que, por ejemplo, en un soneto, los catorce versos sean buenos. Ahora, me preguntaba Gabriela Mistral. ¡Ay, bueno, es una anécdota…! Perdóname que te la haga. Amaury. No, ¡pero qué bueno que me la hace! Por favor. Carilda. Bueno, el día que tuve la dicha de conocerla, porque fue tan generosa Dulce María Loynaz, nuestra enorme, inmensa, inolvidable Dulce María, que me invitó a su casa, la primera vez que fui, porque estaba allí Gabriela. Y entonces Gabriela, después que leyó unos sonetos míos, me dice: con una modestia, que es digna de mencionar. No por lo que entraña el elogio que me hizo, sino por la forma en que ella asumió el conocimiento de una muchacha, como ella llamaba “del campo”, una niña del campo, porque yo era matancera y Dulce María era capitalina y además una mujer que había viajado y yo no había salido de Tirry 81 (calle y número de la casa de Carilda en Matanzas). Amaury. De Calzada de Tirry 81. Carilda. Fue después que he viajado y he tenido otras oportunidades, pero bueno, Tirry 81, para mí, es el planeta. Entonces, ¿qué pasa?, que ella me dice: ¿Y cómo cierra tan bien los sonetos? porque en el último verso a mí siempre se me va la fuerza, palabra textuales de Gabriela, y luego paso mucho trabajo y a fin de cuentas lo dejo así, ¿pero cómo tú lo cierras tan bien? y entonces yo le dije: A mí, casi siempre, los sonetos me suceden en los momentos menos oportunos. Estoy sentada en el cine viendo una película, y me viene un solo verso y me levanto y voy para mi casa a escribir, porque después se me olvida. Es así, eso va en aumento, porque la inspiración es como que se consolida en determinado momento, ya es como una efervescencia, como una llama que crece, que crece y que luego no se vuelve humo, sino se vuelve luz. Y ese verso de la luz, a veces, aparece en el segundo terceto, en el último, o aparece en el primer cuarteto, en cualquier parte, pero uno tiene que darse cuenta y dice: este es el final y lo pone al final y después empieza la rima de abajo para arriba. Amaury. Nunca había oído que nadie empezara un soneto de abajo para arriba. Carilda. Sí, pero eso es una técnica, que yo no sé si yo la descubrí, yo creo que no, pero es un recurso, es un apoyo, y ahí está el soneto a mi madre. Búscalo. Amaury. ¡A claro, claro! Aquí, este soneto, por ejemplo. (Amaury le acerca el soneto Madre mía que estás en una carta, escrito por Carilda) Carilda. No lo vamos a leer todo completo. Amaury. ¡Léalo completo!. Carilda. Ah, ¿completo? Amaury. Completo. Carilda. Y entonces ustedes verán que el último verso, que no lo voy a decir ahora, es realmente el cierre, pero es que ese fue el primero que yo escribí y no lo puse arriba porque echaba a perder el soneto. Amaury. ¡Qué bárbaro! Carilda. ¿Comprende? él se llama: “Madre mía que estás en una carta”. Madre mía que estás en una carta Y en un regaño antiguo que no encuentro. Quédate para siempre aquí en el centro de la rosa total que no se aparta. Madre mía que estás tan lejos Harta de la nieve y la bruma, Espera que entro a ponerte a vivir con el sol dentro Madre mía que estás en una carta. Puedes darle al misterio alguna cita, Convenir con las sombras hechiceras. Puede ser una piedra que se quita O secarte ahora mismo las ojeras, pero acuérdate madre de tu hijita, ¡No te atrevas a todo, no te mueras! Amaury. ¡Madre santa, es que eso es un poema! ¿Cuán duro fue, ya que me leyó esto, el exilio de sus padres, para usted, que decidió quedarse? Carilda. Bueno, imagínate si fue duro el exilio, que yo los acompañé al aeropuerto y en el momento que el avión despegó, yo me quedé sin habla y sin oír. Y recuperé el habla a las pocas horas y todavía me falta por recuperar, que ya es imposible, de eso hace muchos años, el oído derecho. Yo oigo solo de este oído, del izquierdo, que lo recuperé después, de la impresión. Eso fue muy duro, pero la decisión la tomé sin dame cuenta. Desde que empezaron con el asunto de los pasaportes y tengo que significar que ninguno de los dos era desafecto a la Revolución. Pero se iban en pos de hijos y en pos de nietos. Amaury. Claro. Carilda. Mi papá era abogado y quería sacarme el pasaporte como para embullarme, pero sin decírmelo, siempre me respetaron mucho mi opinión, ni siquiera hicieron presión. Y, era muy triste, porque imagínese, ellos se iban…, aparte del amor, de la compañía, yo estaba en aquel momento sola, no tenía a nadie. Pero yo soy una palma que nací aquí y aquí tengo la raíz y no me podía, de ningún modo cortar las raíces, me quedé, eso fue todo. Amaury. Bueno, ya no sé ni cómo hacer las preguntas. La gente tiene una imagen, la imagen que se quiere crear de Carilda. Pero evidentemente hay una Carilda imaginada y hay una Carilda real. Hay una oculta, la que habita en Tirry 81, la que tiene una familia, la que tiene hace veinte años un compañero, un matrimonio, su esposo. Y hay una que es la que la gente quiere fantasear, que es la que acusan de… los términos son feos, pero la Carilda que dicen que es libertina (Carilda ríe), que cuando uno se pone a buscar los sinónimos de libertina… Y yo, yo puedo dar fe en televisión de que usted es una dama, de que usted es una señora. Carilda. Gracias, gracias. Bueno, eso es hasta simpático, no me ha traumatizado, aunque desde luego, en cierto modo ha tergiversado la personalidad literaria de uno. A mí no me afecta desde el punto de vista personal. A mí…, Carilda, es así, es asao… generalmente los artistas arrastramos una serie de comentarios, que son muy convenientes porque así hablan de nosotros, buscan las poesías, y se venden los libros y entonces uno puede hacer una carrera, pudiéramos decir, vamos a llamarle así a esto de ser poeta, que no es ninguna carrera. Ser poeta es una cosa muy difícil, cuando uno, bueno, quiere serlo de verdad. Entonces ¿qué pasa?, que yo, figúrate, muy jovencita escribí el tal “Me desordeno…” y la gente siguió desordenándose por su cuenta (risas), pero me han echado la culpa a mí de todo. La cantidad de hombres que me han dicho a mí y de mujeres: Ay, le agradezco su Me desordeno, porque con esa poesía yo he enamorado y he hecho, y qué sé yo. Y a mí me da risa, porque esa poesía es hasta inocente, es inocente incluso esa parte que dice: “Cuando quiero besarte arrodillada“, esa parte, la gente le da unas explicaciones… que bueno, no lo voy a decir aquí porque estamos en la televisión (risas), pero los televidentes ya saben de lo que estoy hablando. Entonces…, me van a tachar todo esto… (risas) Amaury. (risas) No le vamos a tachar nada. Carilda. ¿Qué dirá el ICRT? (risas) Amaury. No, no, nada, el ICRT es muy comprensivo con este programa. (risas) Carilda. Ay, perdónenme, pero yo, bueno, soy un poco irreverente, pero buena muchacha. (risas) Lo de muchacha es peor que lo de irreverente (risas). Amaury. (risas) ¡Señora, señora, señora! Carilda. Bueno, chico, pero me estoy divirtiendo un poco. (risas) Amaury. Claro que sí, diviértase. Carilda. En estos programas hay que reírse también. Amaury. Claro, no se puede ser tan grave… Carilda. A veces tenemos que llorar por cosas…, que tampoco debiéramos llorar… Amaury. No, pero si yo lo que la quiero es ver divertida. ¿Cómo llorando? No, yo no quiero verla llorando. Carilda. Estoy divertida, pero es culpa tuya, porque yo no sé qué vueltas me has dado, que mira dónde me has puesto (risas), porque yo no iba a venir a ningún programa. Bueno, entonces me atreví a celebrar las piernas de los hombres, de un hombre. Amaury. De uno, claro, no de los hombres. Carilda. En uno están todos los demás. Entonces la boca, los ojos, vaya, decirles piropos a los hombres. Porque siempre eran a las mujeres y bueno, pues yo rompí con eso, porque yo no veo nada en eso de extraordinario, ni de cosas subversivas, irreverentes, que estoy faltando el respeto, porque piensan que estoy hablando de una cosa carnal. Y el amor es espiritual y carnal y tiene que integrarse de las dos cosas, porque si no realmente no responde a la verdadera esencia del amor. Y bueno, todas esas cosas empezaron a traerme, aparte de algunas cosas de la vida de uno, que se han ido deformando y se han exagerado cosas y pasiones. Han inventado cosas con Hemingway, que no pasó nada en lo absoluto, ese era un hombre muy caballeroso, que me dio un elogio, un piropo delante de periodistas y eso empezó a dar vueltas, es un ejemplo que pongo. Y bueno, a cada rato pues a la gente le ha parecido muy natural que yo tenga romances de acuerdo con los versos que he escrito y esos versos están escritos para mis esposos, para las personas que yo he amado y que me han amado. Mi vida ¡figúrate!, en la Ciudad de Matanzas, que es una ciudad como todo el mundo sabe, como todas las provincias de Cuba. Yo allí salía sola con mi novio, cosa que la gente no hacía, mi familia me lo permitía. Estoy hablando de los años 50. Mi primer matrimonio data del 52. Íbamos a sentarnos en el parque…, allí lo más que hacíamos era cogernos las manos. El primer noviazgo mío eran dos días a la semana por la noche, dos horas, y mi mamá sentada cerca, que uno no se podía dar ni un beso porque, ¡imagínate!, ella, cuando ya el novio se iba, se paraba a la mitad del zaguán y ya. Esas cosas de la época…, que ahora los jóvenes disfrutan de otra libertad que ¡bienvenida sea!, porque creo que todo aquello era… Mi mamá era de una educación española. Mis abuelos eran españoles, por parte de madre, pero siempre mi madre, a pesar de haberse educado en aquel sitio, me respetaba, me veía como…, ella decía que no se podía interferir en la vida de los hijos hasta el extremo de querer dirigirlos en todo, que había que dejarles que respiraran el aire de la libertad, que ella no lo había tenido de niña, que siempre estaba con la religión a cuestas. Y, fíjate que todo eso no juega con que después yo escribiera determinados versos, pero a lo mejor era aquel hálito que había en mi casa de respeto lo que me hizo soltarme como un pájaro y volar. Amaury. Y no como un papalote donde hay una cuerda. Porque el papalote parece que está libre, pero hay una cuerda que lo ata. Carilda. Exacto, perfecta la imagen, perfecta la imagen. No sé si te contesté. Amaury. Sí, claro que me contestó. No, me contestó, y de más, qué maravilla. Carilda. Me he casado tres veces. Estuve muchos años sin compañía. Luego llegó un muchacho joven a mi vida, demasiado joven. Toda la ciudad se escandalizó y yo diría que toda Cuba, cuando él empezó a visitarme. Él estuvo como dos años detrás de mí y yo me acuerdo que el primer día que lo vi, lo vi a través de la mirilla de la puerta. Esto no viene al caso, pero bueno. (risas) Amaury. ¡No, cómo no!, sí viene al caso, claro, porque yo voy a leer ahora una cosa que él me mandó. Carilda. ¿Ah, sí? Amaury. Así que sí viene al caso, aquí todo viene al caso y, viniendo de usted, más al caso. Carilda. Bueno, pues entonces yo lo veía por la mirilla de la puerta. Él tenía el pelo largo -¡imagínese! que andaba por los veinte años y yo andaba por… vamos a no hablar de eso. Amaury. No lo diga, no lo diga. Carilda. Yo decía: Este es otro de esos muchachos que vienen a leer versos y a enamorarla a una, porque yo tenía una casa y vivía sola en la casa ¿comprende?, y sabe cómo son las cosas, como había tanta diferencia de edad, yo siempre pensaba… y eso es cosa de malicia también del pueblo. Amaury. Claro. Carilda. Que no nos perdonaron cuando empezamos el romance y cuando nos casamos. Siempre creyeron que él venía por la casa y porque ya yo tenía cierto nombre, y que él era un muchacho joven que empezaba. Pero yo me enamoré de aquel muchacho por muchas cosas. La primera porque la soledad es una cosa terrible, llevaba años viuda…, con mis gatos. Amaury. Con sus gatos, ¡qué maravilla! Carilda. Mis gatos que han sido mis nenés, mis niñitos, mis compañeros. Bueno, y ahí me conoció él, que yo no tenía ni un centavo y él tenía una casa magnífica donde vivir, había huido del campo porque quería estudiar y esa es la historia de ese joven. Amaury. Claro, él me manda hoy, porque no pudo venir al programa por asuntos personales vinculados con su mamá. Él me manda una carta que no voy a leer completamente porque es una carta privada, pero hay una parte que sí quiero compartir con Carilda, que no la conoce. Carilda. No. Amaury. Y con ustedes. Él me dice, bueno, empieza con “Mi muy admirado Amaury”, muy cariñoso. “Lamento profundamente no asistir a este encuentro con nuestra Carilda. Pero me ha resultado imposible” (y ahí me explica por qué). Pero después dice: “Gracias Amaury por llevarte contigo, en esta feliz ocasión, a una mujer que ya no se puede amar desde un solo cuerpo, que se ha hecho menos mía para volverse propiedad de un pueblo que ha encontrado en su voz la suya propia, prohijada por un deseo interminable de amor y de vida.” Y después me señala: “Hay muchas personas que tal vez contemplen nuestra pareja como un sacrilegio porque nos hemos atrevido a unir nuestras dos juventudes en un matrimonio que ya casi cumple dos decenios.” Y es lo que usted ahora ha estado aclarando y eso es lo que me manda a decir. Carilda. ¡Qué casualidad! Amaury. Ahora, él toca aquí un punto, fíjese que yo no lo tenía ni anotado… pero él toca un punto donde dice, hablando de usted y, ahora entonces vamos a hablar de este tema que él toca aquí. “Carilda ha tenido fe en la justicia, en el amor de su gente y en el triunfo de la verdad. Por ello en mi opinión creo que durante aquellos casi veinte años de silencio en su amada Patria, no supo en la soledad ser infeliz.” ¿Por qué usted cree que hubo tanto tiempo sin que a usted la consideraran lo que siempre ha sido? Una cubana fiel, digna y amante de su Patria. Carilda. Bueno, hay cosas que realmente ni el tiempo ha podido aclarar. Porque la verdad, sí, yo siempre creí que todo pasaría y así fue, todo pasó. Yo había escrito, inclusive, un Canto a Fidel cuando estaba en la Sierra (Maestra) porque yo había conocido a Fidel en la Universidad. Ya yo terminando en la Universidad, Derecho, él empezaba y, naturalmente, al ver que estaba en la Sierra -y esa historia no la voy a hacer porque es larga y ya se ha publicado- Me emocionó mucho aquel compañero de la adolescencia, que alentaba una Revolución que era una esperanza. Amaury. Un símbolo. Carilda. Y así, bueno, entonces ¿qué sucede? La Revolución realmente triunfó, pero inmediatamente, casi, a mí me dejaron cesante de mi trabajo. ¿Por qué? porque yo trabajaba en la Alcaldía de Matanzas. Porque las revoluciones son convulsas y cuando comienzan, como en este caso, hay un problema: Que hay mucha gente que se sube al carro de la Revolución sin haber estado en esa Revolución. Y a mí me parece que los intermediarios fueron, no en este caso, pero en muchos casos, fueron responsables de las injusticias y de las cosas que pasaron. Yo tuve la suerte de que no me quedé completamente cesante y esto es muy bueno decirlo, porque siempre hay alguien que esclarece, que salva, que es un abogado, que hoy es muy notable y es uno de los defensores de los Cinco Héroes, que es el doctor Rodolfo Dávalos. Amaury. Una eminencia, el doctor Dávalos es una eminencia. Carilda. Una eminencia, jurista y él me dijo: no, no importa, tú eres abogada y tú no has cometido delitos… Además, tú tienes ese Canto a Fidel. Él es poeta, pero de esos silenciosos, que no publican. Amaury. Sí, que no quiere publicar. Carilda. Tremendo escritor ¿eh?. Y entonces, bueno, entré en aquel bufete colectivo y fui muy feliz en ese bufete, porque allí se pudo hacer mucha justicia y muchas cosas y no se habló de nada. Pero el veto empezó a pesar de estar yo en el bufete. Amaury. ¿Y no se le publicaba entonces, nada? Carilda. Esto es bueno que se sepa, ¡qué me van a publicar! Pasaron muchas cosas. Amaury. ¿Y cuándo termina el veto? Carilda. Eso termina un día, un buen día, un magnífico día, estoy nombrando personas porque estoy hablando verdades. Amaury. Claro, claro. Carilda. No me gusta hacer anonimatos, y fulano, y que esto. Bueno y además, estoy muy agradecida al doctor Armando Hart. Amaury. Un hombre de la cultura y un hombre justiciero. Carilda. Se apareció en Matanzas un día, a averiguar qué pasaba conmigo, porque él no entendía nada. Amaury. Pero usted nunca abandonó ninguna Revolución ¿qué Revolución abandonó usted? Carilda. ¿Pero qué abandono?, ¡pero si no me exilé con toda mi familia y seguí en mi Tirry 81 pasando calamidades! Yo he comido sopas de yerbas y todas esas cosas. Yo tuve que arrancar las puertas grandes de Tirry 81, que están detrás de las ventanas, para un pobre guajiro que vino, bueno, no era pobre porque tenía más dinero que yo, y me compró las puertas y con eso comí como seis meses. ¡Ay, pero no soy ninguna víctima! Amaury. ¡Claro que no!. Carilda. No, no, no. Amaury. ¡Y con esos ojos!. Carilda. Muy dichosa. Muy dichosa, porque escribí más poesía que nunca. Escribe y escribe y escribe y feliz, feliz. Amaury. Bueno, aquí están sobre la mesa sus libros… Carilda trajo sus libros. Yo me he quedado frío. Carilda. Tengo 43 libros. Claro, entre ediciones, reediciones y cosas en el extranjero. En España tengo cinco libros. Amaury. Ahora, yo quiero de todas maneras, porque cuando hablamos por teléfono el otro día… Carilda. Sí. Amaury. …Hablamos mucho, hablamos más por teléfono que lo que vamos a hablar en la entrevista. Y pasó una cosa bien curiosa, porque yo le dije que a mí me encantaba este soneto, de Sonetos a mi padre, el cuarto soneto. Carilda. Ah, sí. Amaury. Y usted de pronto me dijo: qué casualidad, era el que le gustaba a ¡Eliseo Diego! Carilda. Sí, así mismo es. Amaury. Léame, por favor, ese soneto. Carilda. ¿El último? Amaury. Ese soneto, el último, yo se lo escogí. Carilda. Este es el Cuarto Soneto de la colección, pero cuatro son demasiado. Tu sillón de dentista ¿dónde está? Tu violín de estudiante, ¿cómo suena? Enterrabas centavos en la arena Y otros nombres ponías a mamá. Guardo todas tus cartas y retratos En mis sueños tu próstata se cura, Por el fondo del patio y la ternura Se encaminan tus últimos zapatos. Quiero verte salir en un postigo, ¡Ven fantasma, ven ángel oportuno! Ya no sé lo que hago, lo que digo, Porque quiero beber el desayuno, Con mi padre, mi sabio, mi mendigo En Calzada de Tirry 81. Amaury. ¡Es que es algo…, es precioso ese soneto! y se ve que a usted le afecta, todavía le afecta. No sé ni para qué lo traje. Fíjese qué rápido vamos a hablar de otro tema. A ver si usted me quiere decir este secreto. En este libro (Amaury le muestra un libro) hay una carta, están sus prosas, aparte que hay una foto aquí tremenda, la foto de la portada, con el pelo corto. Carilda. Está agotado ese libro. Amaury. Ese libro está agotado, ah, bueno. Pero ya uno va teniendo cosas que están agotadas, uno se va quedando con ellas. Pero hay un momento, donde hay varias cartas. Usted no quiere, ya me lo dijo por teléfono, hablar de a quién le había hecho las cartas y yo, por supuesto, respeto eso, pero no puedo privar al televidente de esa Carilda irónica que aparece aquí en un momento de esta carta. Carilda. ¡Ah!, va a leer esa, ¡vale!. Amaury. En un momento de esta carta yo por poquito me…, yo me arrastré cuando la leí la primera vez -carta número 4 se llama-, Te escribo por recomendación de este papel amarillo que vi sobre la mesa y para que me perdones el incumplimiento de la amenaza: El director tropieza con todos los sueños, así que dispuso sin mi permiso, que trabajara hoy de noche. Como te encantan las sorpresas, estarás muy contento de ver a otra mujer y no a la que pronosticó el telegrama. Pues bien, deseo con todos los humores negros de mi venganza, que solo caiga en tus brazos una soprano calva de 190 libras. No vamos a hablar de a quién se la hizo, pero vamos a hablar de esa Carilda maldita, esa Carilda, que vaya, es que no… “Lo que deseo es que caiga en tus brazos una soprano calva de 190 libras“. (risas) Carilda. (risas) Ay, son cosas de la juventud. Amaury. Ahora, ¿cómo fue aquello del tren que viene de Santiago, pasa por Matanzas y una persona que la amaba le ponía mensajes en el tren? ¿Qué cosa es eso, Carilda? Carilda. Ay, pero mira lo que estás sacando hoy. Óyeme, pero ¿cuántos cuentos te han hecho? Qué cosas… Amaury. Pero es que eso es tan bello. Carilda. Bueno, es verdad, es una cosa de…, y estoy hablando del año 50, porque fue el año, lo recuerdo perfectamente, en que salió Al sur de mi garganta. Al sur… nace en el 49, pero se lleva el Premio Nacional de Poesía del 50. Y entonces él es un poeta, por cierto, un poeta muy singular, porque es que tenía muchos oficios y era matemático, era graduado de La Sorbona, de Yale, yo no sé de cuántos lugares. Era un hombre muy talentoso que apareció en Cuba. Y como él quería enamorarse, porque él quería enamorarse de algún modo de alguna cubana, y sobre todo que fuera un amor imposible, digo yo, porque hizo todo lo posible. Yo tenía mi novio, yo era novia de Hugo Ania que era un noviazgo reciente y que después nos casamos. Y entonces, pues… No voy a contar lo que pasó en el medio, porque hubo problemas muy serios. Amaury. No, no. Carilda. Esa es la mitología con que el pueblo cubano me ha adornado a mí, porque ese mito es un adorno. Amaury. Claro. Carilda. La gente quiere que yo sea como me han inventado. Amaury. Exactamente. Carilda. Y realmente yo soy una señora muy respetable, ¡Ay!, ¿qué dije? (se tapa la boca) Amaury. No, sí lo es. Sí, Carilda, sí lo es. Carilda. No, pero es que todo el mundo se va a disgustar. Amaury. No, nadie se va a disgustar. Carilda. ¿Tú crees que no? Amaury. No, nadie se va a disgustar. La gente va a seguir con la mitología que quiera crearse sobre usted. Pero es bueno que de una vez se diga, que lo importante de usted, aparte de su belleza, aparte de su talento, de su simpatía, es su gran obra poética, que es lo que la va a trascender. Y la mitología que la gente se crea sobre los artistas, esa se va a quedar en el camino y lo que va a quedar al final, son estos poemas, son estos libros, eso es lo que va… Carilda. …Ay, Amaury. ¡Qué generoso eres! Amaury. No, generoso no, soy justo con usted. Carilda. Te quiero. Amaury. Carilda ¿Y entonces lo del tren? ¿El tren salía de dónde? Carilda. Él tren venía de Santiago y llegaba a La Habana, aquí, pero claro, pasaba por Matanzas. Y entonces, este escritor, uruguayo, me escribía, después que se fue de Matanzas, me escribía desde allá. Pero él quería que llegaran las cosas tan pronto que iba al último vagón del tren. Ya me lo había advertido por teléfono: por la mañana me decía: Carilda, ahora voy a escribirte un mensaje en la pared del vagón último del tren, bueno, yo iba por la noche cuando llegaba el tren a Matanzas a ver aquello, a leer aquello. ¡Qué lindas cosas escribía! Amaury. Por eso ahí empiezan las historias. Carilda. Y ahí empiezan las historias de Carilda ¿comprende? Amaury. Claro Carilda. Que después de todo son historias muy lindas y no hay por qué renunciar a ellas. Amaury. Pero mire, yo le voy a decir algo. El pueblo cubano, el lector cubano y más que el lector cubano, incluso, el que no la ha leído -que se está perdiendo una de las maravillas del mundo- la quiere a usted, usted es amada. Usted es amada por todo el mundo. Carilda. No, porque amo, porque amo al pueblo. Amaury. Claro, porque eso va y viene, eso es un efecto de ida y vuelta. Ahora, yo quiero, Carilda, porque ya el programa lo estamos terminando. Mire, usted me trajo hoy de regalo la última edición de Al sur de mi garganta, es esta. Carilda. 60 años cumplió el año pasado. Amaury. Con una dedicatoria que es para mi corazón, yo no voy a leer lo que dice, que es muy emocionante y ya yo tengo hace rato los ojos aguados. Pero es que yo traje para que Carilda me firmara… Carilda. …¡Ay, chico!… Amaury. …La edición Príncipe… Carilda. …Eso me emocionó… Amaury. …De Al sur de mi garganta... Carilda. Porque nadie la tiene, porque se hicieron 300 ejemplares. Imagínense, en el año 49. Amaury. Claro, del 49 y esto se lo regala a mi tío Raúl y por supuesto a mi tía María Luisa también, Pascualito, un amigo, el 11 de marzo de 1950. Y aquí está con las ilustraciones. ¿Cuántos libros se hicieron de esta edición? Carilda. 300 nada más. Esto lo pagó mi padre. Entonces no había editoriales. Amaury. ¡Fíjese que es propiedad del autor!. Carilda. Y tuve la suerte de que con ese librito gané el premio. Amaury. Entonces usted me va a hacer el favor de poner su nombre aquí. Y después, porque estamos en televisión, me pone una cosita más, porque eso es un tesoro de la biblioteca nuestra, de mi esposa y mía. Un programa bien emotivo y bien difícil. Esto no se puede creer. Carilda. Es que tú no habías nacido cuando el libro se publicó. Amaury. ¡Claro que no había nacido!. Carilda. Ah, imagínate. Amaury. Pero ya había nacido usted, había nacido su poesía y a lo mejor, quién sabe si yo nací de algún poema de estos. Entonces, ahora va a terminar el programa usted. Yo antes le voy a agradecer su gentileza, su viaje, el suyo y el de sus compañeros que la han traído. Ha sido un programa muy especial. Es además el programa con el que estamos comenzando este año 2011, es el primer programa de enero de 2011. Todavía hay una grata temperatura afuera, hemos acabado de pasar las Navidades…, yo quiero que usted me lea este poema que es uno de los poemas que más me gusta suyo, y que de esa manera despida el programa y le agradezco señora, su poesía, su talante, su genio, su gentileza, su belleza. Su amor a Cuba, su amor a la Patria. Carilda. Gracias, la agradecida soy yo. Gracias. Adiós locura de mis treinta años, Besado en julio bajo luna llena, Al tiempo de la herida y la azucena Adiós mi venda de taparme daños. Adiós mi excusa, mi desorden bello, mi alarma tierna, mi ignorante fruta Estrella transitoria que se enluta, Esperanza de todo por mi cuello. Adiós muchacho de la cita corta, Adiós pequeña ayuda de mi aorta, Tristísimo juguete violentado Adiós verde placer, falso delito Adiós sin una queja, sin un grito Adiós mi sueño nunca abandonado. Amaury. Gracias, Carilda, muchas gracias por existir. Nos veremos pronto. Carilda. Gracias. Petí arregla el vestido de la poeta y Solís verifica que el micrófono permita escuchar con nitidez la voz de Carilda. El programa está por comenzar. Referencias Cuba Debate - www.cubadebate.cu/noticias/2011/01/04/carilda-oliver-he-sido-muy-feliz-siendo-poeta/ BIOGRAFÍA Su primer libro, "Preludio Lírico", fue publicado en Matanzas en 1943. En esta selección de poemas escritos entre 1939 y 1942, ya se hacen presentes: -El amor, con sus devanes, inquietudes, zozobras, desalientos, aciertos, quizás con una pluma inexperta que no sabía dominar emociones e impregnada del entorno un tanto melodramático que a muchos atacaba; -La familia, la abuela, la madre y el padre presentes en un cuadro que no desaparecerá nunca de su obra. Después de obtener el Segundo Lugar en el Concurso Internacional de Poesía, organizado por la National Broadcasting Co. de Nueva York, Estados Unidos, publica en 1949 "Al sur de mi garganta", libro con el que ganó el Premio Nacional de Poesía, al mismo tiempo que trabaja en la biblioteca Gener y del Monte, es declarada Hija Eminente de la Atenas de Cuba. En esa misma temporada culmina sus estudios en la Escuela de Artes Plásticas de Matanzas que la acreditan como profesora de Dibujo, Pintura y Escultura y contrajo nupcias con el abogado y poeta Hugo Ania Mercier, de quien se divorciaría en 1955 tras una relación turbulenta. Tuvo otros 2 matrimonios: Félix Pons, cuya muerte la inspiró para su libro "Se me ha perdido un hombre" y finalmente Raidel Hernández, muy joven, con quien comparte ahora su vida. Se le reconoce una intensa labor como profesora en escuelas de su natal Matanzas, ligando a su amor por el magisterio su trabajo como abogada y su pasión por la poesía. Hasta la actualidad cuenta con 43 publicaciones que incluyen prosa y poesía, más varios premios y reconocimientos. Poemas suyos han sido traducidos al inglés, francés, italiano, ruso, búlgaro, rumano y vietnamita. Desde 1980 funciona en Madrid una Tertulia Poética que lleva su nombre y que, además, convoca anualmente a un Premio Internacional de Poesía. Aunque su obra transmite muchas veces dolor, añoranza o vacío, desde el "Me desordeno amor..." que hizo con tan solo 24 años, su poesía está cargada de sensualidad, desenfado, seducción, y la muestran progresista, liberal y hasta un tanto irreverente. En una ocasión comentó: "Tal vez me colgaron la etiqueta de erótica porque conocen más esa proyección mía que las otras. Es la que escogen los declamadores, la que aparece en programas radiales y aquella que se ha musicalizado y difundido casi sin yo darme cuenta." Ella misma nos da su receta de erotismo: “Hay que renunciar a traducir su misterio. Entre el erotismo y la profanación, entre lo que debe ser y lo que tiene que ser hay una línea divisoria muy fina. Nace, no se aprende”. Referencias Wikipedia - es.wikipedia.org/wiki/Carilda_Oliver Cuba Literaria - www.cubaliteraria.cu/autor/carilda_oliver/biografia.html Ecured - www.ecured.cu/index.php/Carilda_Oliver_Labra
Doralina de la Caridad Alonso Pérez (más conocida por su seudónimo Dora Alonso, Recreo, hoy Máximo Gómez, Matanzas, 1910-2001) fue una escritora cubana, Premio Nacional de Literatura. Es la autora cubana para niños más traducida y publicada en el extranjero y la que cuenta con mayor número de ejemplares. Su estilo literario narrativo está basado en la sencillez y el manejo de las emociones.
María Elena Walsh (Ramos Mejía, Buenos Aires, 1 de febrero de 1930 – Buenos Aires, 10 de enero de 2011) fue una poetisa, escritora, música, cantautora, dramaturga y compositora argentina, especialmente famosa por sus obras infantiles, que ha sido considerada como «mito viviente, prócer cultural y blasón de casi todas las infancias». Por su parte, el escritor Leopoldo Brizuela ha puesto de relieve el valor de su creación diciendo que «lo escrito por María Elena configura la obra más importante de todos los tiempos en su género, comparable a la Alicia de Lewis Carroll o a Pinocho; una obra que revolucionó la manera en que se entendía la relación entre poesía e infancia.» Maria Elena Los juglares son eternos Porque viven en la voz del viento. Elegiste irte en un día señalado, Juglar esquivo de la voz de caña, Un día que conjuga dos dolores, Otro como tú, eligió ese día. En un tiempo, él también Creyó en las palabras y su fuerza y dulzura Para calmar las olas de las duras tempestades Pero sin fe en sí mismo Abandonó en la lucha La consolación de la poesía. Nos diste y nos dejaste Sin reparo, ni medida, ni especulaciones varias, Nos diste así, tranquilamente Como se dan las aguas a los mares, Luego de que atraviesan la montaña. Fuiste tierna y dura A un mismo tiempo; A veces no entendías, Tanta estupidez, Tanta locura, Tanta falta de amor, Tanto destino, Tanta circular versión Tan repetida, Tanta malevolencia. Yo canté contigo Y les canté muy quedo En tiempos que las sombras eran muchas A aquellos que tomados de mi vida Eran la vida toda para mí. Y siempre te canté Cuando en el alma La duda de quien soy y a donde vago Llenaba de tristeza la esperanza Y entonces fui cigarra, Como tú, En noches negras. María Elena, No hace falta mencionar siquiera tu apellido, Siempre serás la María Elena Del tinglado y la luz.
Violeta del Carmen Parra Sandoval (San Fabián de Alico o en San Carlos, el 4 de octubre de 1917 – Santiago de Chile, 5 de febrero de 1967) fue una cantautora, pintora, escultora, bordadora y ceramista chilena, considerada por algunos la folclorista más importante de Chile y fundadora de la música popular chilena. Era miembro de la prolífica familia Parra. El 5 de febrero de 1967, a los 49 años de vida, y tras varios intentos fallidos, Violeta Parra se suicidó.
Julia de Burgos (17 de febrero de 1914 - 6 de julio de 1953), nacida en Carolina, Puerto Rico, es considerada por muchos críticos como la más excelsa poeta nacida en Puerto Rico. Fue también partidaria de la independencia de la isla. Además de mostrar el sentimiento de amor en sus poemas, también estimuló en las mujeres la liberación femenina. Fomentó en sus años la verdadera mujer puertorriqueña a través de sus poemas donde plasmó los problemas de las mujeres de su país. Con una voz de rebeldía y feminista escribió obras que iban en contra de la norma de la sociedad y los convencionalismos de su época. Obras muy estudiadas por Julia de Burgos han sido destacadas por el alzamiento feminista que trae en sus versos.
Delmira Agustini (Uruguay, 24 de Octubre de 1886 – 6 de Julio 6 1914) fue la más destacada poetisa del Modernismo. Exuberante prestigio para cualquier escritora, pero no para la crítica de Rubén Darío. El gran maestro la elevó hasta la cúspide de la literatura española. La comparó con Santa Teresa. En Pórtico, Darío la proclama como la única, desde la Santa, en expresarse como mujer.
Blanca Leonor Varela Gonzales (Lima, Perú, 10 de agosto de 1926 - † 12 de marzo de 2009) fue una poeta peruana, considerada como una de las voces poéticas más importantes del género en América Latina. Se inició en poesía en la Universidad Nacional Mayor de San Marcos en la capital peruana, donde ingresó en 1943 para estudiar Letras y Educación. Ha sido condecorada con la Medalla de Honor por el Instituto Nacional de Cultura del Perú. Murió el 12 de marzo de 2009 en Lima, a la edad de 82 años.
Olga Isabel Chams Eljach (Barranquilla, 21 de agosto de 1922 – Barranquilla, 18 de marzo de 2009) fue una poetiza colombiana de ascendencia libanesa, conocida por el seudónimo de Meira Delmar. Fue una de las más significativas poetizas del siglo XX en Colombia, considerada el nombre femenino más destacado de la poesía del país. Fue miembro de la Academia Colombiana de la Lengua desde 1989.
Dolores Veintimilla de Galindo (Quito, 12 de julio de 1829 - Cuenca, 23 de mayo de 1857) fue una poeta ecuatoriana del siglo XIX. Durante su corta vida fue la creadora de poemas de corte romántico que están cargados de elementos que asocian a la mujer con el papel de víctima asociados con sentimientos de dolor, tristeza, anhelo del pasado, amores frustrado y pesimismo. Fue influenciada por la formación de la subjetividad femenina de su época. Su poema “Quejas” está lleno de esos sentimientos que reflejan su estado anímico. El fracaso en su matrimonio con el médico colombiano Sixto Galindo, así como su pensamiento feminista adelantado a la época, marcarían la personalidad y los trabajos posteriores de Dolores. La persecución e incomprensión de la sociedad cuencana la llevó al suicidio.
Piedad Bonnett (Amalfi, 1951) es una poeta, novelista, dramaturga y crítica literaria colombiana. Es Licenciada en filosofía y letras de la Universidad de los Andes donde ha ejercido como profesora en la facultad de artes y humanidades desde 1981. Su poesía, teatro y narrativa están profundamente arraigadas en su experiencia vital y expresan la visión de la mujer de clase media en un país desgarrado por múltiples violencias, desigualdades y conflictos. Ha desarrollado, además, una fructifera labor crítica y de difusión de la poesía colombiana.
Gertrudis Gómez de Avellaneda (Santa María de Puerto Príncipe, Cuba, 23 de marzo de 1814 - Madrid, 1 de febrero de 1873), llamada cariñosamente «Carcajada» o «La Avellaneda», fue una novelista, dramaturga y poetisa cubano-española del Romanticismo. Se instaló en la Península a los veintidós años, donde comenzó a publicar bajo el seudónimo de «La Peregrina» y se dio a conocer con la novela Sab, considerada la primera novela antiesclavista (anterior incluso a La cabaña del tío Tom, de la escritora estadounidense Harriet Beecher Stowe).
Ángela Figuera Aymerich (Bilbao, 30 de octubre de 1902 - Madrid, 2 de abril de 1984) fue una escritora española, representante de la denominada poesía desarraigada de la Primera generación de posguerra española. Nació en Sevilla pero se crio en Bilbao siendo la hija primogénita de la valenciana Amelia Aymerich y de Jesús Ángel Figuera. Estudió en el colegio del Sagrado Corazón y obtuvo el título de Bachiller en 1924 en el Instituto Provincial. En 1925 inició estudios de Filosofía y Letras como alumna libre, examinándose en Valladolid y concluyéndola en Madrid.
Teresa de Cepeda y Ahumada, más conocida por el nombre de Santa Teresa de Jesús o simplemente Teresa de Ávila (Ávila, 28 de marzo de 1515 – Alba de Tormes, 4 de octubre de 1582), fue una religiosa, doctora de la Iglesia Católica, mística y escritora española, fundadora de las carmelitas descalzas, rama de la Orden de Nuestra Señora del Monte Carmelo (o carmelitas).
Concepción Méndez Cuesta (Madrid, 27 de julio de 1898 - México, 7 de diciembre de 1986), conocida como Concha Méndez, fue una escritora española de la Generación del 27, especialmente conocida por su obra poética. Su obra poética está recogida en Poemas 1926-1986, edición preparada por el marido de su nieta Paloma, el profesor James Valender. Sus tres primeros libros, "Inquietudes", "Surtidor", "Canciones de mar y tierra" constituyen una trilogía caracterizada por la influencia del Alberti neopopularista y por la incorporación al verso de todo aquello que en los años veinte representaba la modernidad: el deporte, el cine, los automóviles.
Ida Vitale (Montevideo, 2 de noviembre de 1923) es una poeta, traductora, ensayista, profesora y crítica literaria uruguaya miembro del movimiento artístico denominado “Generación del 45” y representante de la poesía "esencialista". Inscrita en la tradición de la vanguardia histórica americana, su poesía indaga en la alquimia del lenguaje y establece un encuentro entre una exacerbada percepción sensorial de raíz simbolista, siempre atenta al mundo natural, y la cristalización conceptual en su perfil más preciso.1 Ha recibido diversos premios, entre ellos Premio Octavio Paz (2009) el Premio Alfonso Reyes (2014) el Premio Reina Sofía (2015), el Premio Internacional de Poesía Federico García Lorca (2016), el Premio Max Jacob (2017) y el Premio Cervantes (2018) que valora “su lenguaje, uno de los más reconocidos en español”.
Violeta Luna (Guayaquil, 24 de febrero de 1943) es una poetisa, narradora, crítica literaria, ensayista y catedrática ecuatoriana. Ingresó a la Universidad Central del Ecuador, en Quito donde obtuvo el título de Licenciada en Castellano y Literatura, y un Doctorado en Ciencias de la Educación. Ejerció la cátedra de Lengua y Literatura, durante veinte y cinco años, en varios colegios y universidades del país.
Clementina Suárez (Juticalpa, Olancho, 1902 – Tegucigalpa, 1991) Fue una poetisa hondureña reconocida nacional e internacionalmente, considerada la “matriarca de la poesía hondureña”, promotora de la cultura y el arte de Honduras y Centroamérica. Casada con el famoso pintor y escultor José Mejía Vides, Clementina Suárez es uno de los nombres fundamentales de la poesía hondureña de vanguardia. Su obra es uno de los testimonios más genuinos y ejemplares que se puede encontrar dentro de la tradición literaria de Honduras.
Marilina Rébora Fue una poeta y prosista Argentina. Estudió dibujo y pintura junto a Ernesto Riccio, Vicente Puig, Susana Aguirre y Horacio Butler. Expuso sus obras en diversos salones y se halla representada en museos argentinos. Paralelamente desarrolló su carrera literaria. Sus primeros poemas datan de 1936, 1937 y 1938. Publicó los libros "Los días de los días" (1969), "Libro de estampas" (1972), "El Río Azul" (1975), "Tiempos de la vida" (1975), "Las confidencias" (1978), "Animalerías" (1980) y "El lagarto estaba harto" (1986). Dejó más de veinte obras inéditas. Marilina fue una poeta solitaria que a lo largo de su vida huyó de la estridencia bulliciosa y la difundida notoriedad, pero, en cambio, cultivó devotamente su mundo interior y su opulenta imaginación
Marosa di Giorgio Medici (Salto, 1 de enero de 1932 - Montevideo, 17 de agosto de 2004), poeta uruguaya que también se aventuró con la prosa erótica y la novela en obras recientes. Descendiente de inmigrantes italianos y vascos que fundaron quintas en zonas rurales del Uruguay, Marosa di Giorgio comenzó a publicar en los años 50. En los dos tomos de Los papeles salvajes (1989 y 1991) recopiló sus poemas publicados hasta entonces.
Josefina García-Marruz Badía, conocida artísticamente como Fina García Marruz (La Habana, 28 de abril de 1923), es una poetisa e investigadora literaria cubana, que ha recibido numerosas distinciones entre las que destacan los premios Nacional de Literatura 1990, Iberoamericano de Poesía Pablo Neruda 2007 y el Reina Sofía de Poesía Iberoamericana 2011. Su obra poética ha sido traducida a varios idiomas y ha formado parte de numerosas antologías. Sus ensayos y poesías, además de en libros, han aparecido en diversas revistas y pediódicos, como Lyceum, Nueva Revista Cubana, Cuba en la Unesco, Islas, La Gaceta de Cuba, Unión, Revista de la Biblioteca Nacional o Anuario Martiano.
Silvina Ocampo (Buenos Aires, 28 de julio de 1903 - Buenos Aires, 14 de diciembre de 1993) fue una escritora argentina, poetisa, narradora y traductora, sus inicios en la literatura están ligados a la influencia de su hermana Victoria, fundadora de la revista Sur, y a la del escritor Adolfo Bioy Casares, al que conoció en el año 1933 y contraería matrimonio en 1940 y cuya hija ilegítima, Marta Bioy Ocampo (1954-1994), adoptaría. Su primera publicación profesional fue el libro de cuentos Viaje olvidado (1937), algo menospreciado en su época pero reivindicado en el ámbito académico después de su muerte. En 1954 recibió el Premio Municipal de Literatura por su poemario Espacios métricos; en 1962, el Premio Nacional de Poesía por Lo amargo por dulce y en 1988 el Premio del Club de los 13 por Cornelia frente al espejo, su última antología de cuentos.
Matilde Kirilovsky de Creimer (Berisso, 24 de febrero de 1912 - La Plata, 13 de septiembre de 2000), también conocida por su pseudónimo literario Matilde Alba Swann, fue una escritora, poetisa, periodista y abogada argentina. Fue una de las primeras mujeres que obtuvo el título de abogada en la Universidad Nacional de La Plata, provincia de Buenos Aires, en el año 1933. Publicó ocho libros de poesía e innumerables artículos periodísticos. Fue corresponsal de guerra para el diario El Día en la guerra de Malvinas. También se desempeñó como presidenta de la Filial La Plata de la Sociedad Argentina de Escritores.
Clara Isabel Alegría Vides (Estelí, 12 de mayo de 1924-Managua, 25 de enero de 2018) fue una escritora, poeta, narradora, ensayista y traductora nicaragüense-salvadoreña. El VII Festival Internacional de la Poesía de Granada le fue dedicado en homenaje y reconocimiento en vida a su carrera como escritora y del Premio Reina Sofía de Poesía Iberoamericana 2017. Tradujo al español la poesía de Robert Graves y de otros autores anglosajones.
Mirta Aguirre Carreras. Poetisa, crítico y ensayista cubana nacida en La Habana el 18 de octubre de 1912. Se doctoró en leyes en 1941. Realizó estudios especiales de literatura, música y filosofía marxista. Fue miembro activo de la Liga Juvenil Comunista, la Liga Antimperialista, Defensa Obrera Internacional, el Partido Comunista de Cuba y el Partido Socialista Popular. Vicepresidenta de la Federación Democrática de Mujeres Cubanas y responsable político de la Sociedad Cultural Nuestro Tiempo. Durante años tuvo a su cargo la sección de cine, teatro y música del Periódico Hoy. Después del Triunfo de la Revolución Cubana fue directora de la Sección de Teatro y Danza del Consejo Nacional de Cultura. Utilizó los seudónimos Rosa Iznaga, Rita Agumerri y Luis Robles Garza. Falleció en La Habana, el 8 de agosto de 1980.
Josefina de la Torre Millares (Las Palmas de Gran Canaria, 1907−Madrid, 12 de julio de 2002) fue una poetisa, novelista, cantante lírica y actriz canaria vinculada a la Generación del 27 y la corriente vanguardista hispánica de la primera mitad del siglo XX. Está en la nómina de Las Sinsombrero. Comenzó a escribir poesía a los nueve años, en 1915, cuando compuso unos versos dedicados al poeta modernista canario Alonso Quesada, aunque un año antes ya había escrito un poema de homenaje a Benito Pérez Galdós, y a los 15 comenzó a publicar en revistas.1 La influencia de su hermano Claudio, novelista y dramaturgo en auge en aquel momento, y Premio Nacional de Literatura en 1926, fue muy importante para su iniciación en el campo de la literatura y también de la representación teatral. Así en 1928, creó en su casa de Las Canteras el llamado Teatro Mínimo que dirigía su hermano Claudio.
Mercedes de Velilla y Rodríguez fue una ensayista, dramaturga, pero sobre todo poetisa y una de las escritoras más representativas del movimiento literario de Andalucía en la segunda mitad del siglo XIX. Nació en Sevilla el 24 de septiembre de 1852 en el seno de una familia con gran vocación literaria. De hecho, casi todos los miembros de su familia escribían, especialmente poesía, como su madre María Dolores Rodríguez, su hermana Felisa pero y sobre todo su hermano José de Velilla, uno de los dramaturgos más fecundos de la segunda mitad del siglo XIX sevillano.
Norah Lange (23 de octubre de 1905, Buenos Aires – 4 de agosto de 1972, Buenos Aires) fue una narradora y poetisa argentina de vanguardia, vinculada primero al Grupo Martín Fierro, especialmente con Jorge Luis Borges y luego al Grupo Proa de Leopoldo Marechal. Destacada por haber roto en Argentina el canon de que las mujeres no debían escribir prosa. Llamativa por su condición de pelirroja, se destacaba por su audacia para irrumpir en ámbitos hasta entonces reservados a los varones.
Clara Janés Nadal (Barcelona, 6 de noviembre de 1940) es una escritora española que cultiva diversos géneros literarios. Destaca como poeta y como traductora de diferentes idiomas centro-europeos y orientales. Premio Nacional de Traducción en 1997 por el conjunto de su obra, desde 2015 ocupa la silla «U» de la Real Academia Española. Es la décima mujer electa miembro de la RAE. Presentó su discurso de ingreso en junio de 2016, titulado "Una estrella de puntas infinitas. En torno a Salomón y el Cantar de los cantares". Clara Janés cultiva la poesía, la novela, la biografía y el ensayo y se distingue como traductora, particularmente de la lengua checa y de la obra poética de Vladimír Holan y Jaroslav Seifert. Ha vertido también al español a Marguerite Duras, Nathalie Sarraute, Katherine Mansfield y William Golding y, en colaboración con conocedores de sus lenguas, a poetas turcos y persas, tanto modernos como místicos antiguos.
Ana María Rabatté y Cervi, (Tampico, Tamaulipas, 31 de julio de 1933 – Tampico, Tamaulipas, 22 de febrero de 2010), fue una escritora mexicana, hija de don Francisco Rabatté Estopier y doña Sara Cervi de Rabatté, originarios de Túxpam, Veracruz. Falleció en su casa en Tampico, a la edad de 76 años el 22 de febrero de 2010 debido a complicaciones ocasionadas por la diabetes.
Cecilia Vicuña Ramírez (Santiago de Chile, 1948) es una artista visual, poeta, cineasta y activista chilena. Es considerada una de las voces más auténticas y polifacéticas de la poesía contemporánea y una potencia artística que encarna la exploración creativa y la resistencia política. La práctica artística y poética que Cecilia Vicuña llama “lo precario”, creada a mediados de la década de 1960 en Chile, incluye la escritura, el performance y el arte. Su obra ha sido calificada como anticipadora de grandes movimientos poéticos, artísticos y académicos, desde el arte conceptual y el performance de poesía, hasta el land art y discursos de la segunda ola de feminismo, que empezarían a florecer en las décadas 70 y 80 del siglo XX.
Rosario Sansores Prén (Mérida, Yucatán; 25 de agosto de 1889 — Ciudad de México; 7 de enero de 1972) fue una poetisa mexicana, conocida por obras como "Cuando tú te hayas ido", poema que sirvió de base al pasillo "Sombras", musicalizado por el compositor ecuatoriano Carlos Brito Benavides. Nació en un hogar acaudalado, hija de Juan Ignacio Sansores Escalante y Laura Prén Cámara, quienes intentaron disuadirla de escribir poesía a corta edad. A los catorce años de edad se casó con el cubano Antonio Sangenis y se mudó a La Habana, donde viviría por veintitrés años. Durante el tiempo que vivió en Cuba se dedicó a escribir artículos sobre temas sociales en periódicos y revistas. En 1911 empezó a publicar sus libros de poesía, la mayoría firmados con seudónimos
"Yo escribo porque necesito hacerlo, el impulso de escribir es irracional. A mí me gustaría mucho que mi escritura sirviera para despejar incógnitas, para mejorar cosas de la identidad nacional, de las relaciones entre las culturas, de las relaciones de carácter familiar, de la familia, de la familia cubana, etc". Nancy Morejón Nancy Morejón (La Habana, 7 de agosto de 1944 - ), poetisa, dramaturga, ensayista y traductora cubana. Su padre era de ascendencia africana y su madre de raíces chinas y europeas. Habiendo destacado desde muy temprana edad en los estudios, escribía poemas a los trece años y en 1959, con apenas quince, llegó a titularse de profesora de inglés; obtuvo el bachillerato en letras en 1961. A los dieciocho años publicó su primer libro de versos, Mutismos. Entre 1963 y 1964 fue profesora de francés en la Academia Gustavo Ameijeiras de La Habana y trabajó como traductora para el Ministerio del Interior. Obtuvo el premio «Rubén Martínez Villena» en 1964 y militó entre 1963 y 1965 en el Comité de Base de la Unión de Jóvenes Comunistas de la Escuela de Letras; se licenció en lengua y literatura francesas por la Universidad de la Habana (1966) y se doctoró con una tesis sobre el poeta martiniqueño Aimé Césaire. Entre 1986 y 1993 fue directora del Centro de Estudios del Caribe de Casa de las Américas, labor que reasumió en 2000. Desde 1991 es Miembro de la Academia de Ciencias de Cuba. Elaboró una Recopilación de textos sobre Nicolás Guillén (La Habana, Ediciones Casa de las Américas, 1974) y se ha dedicado principalmente a la traducción simultánea en eventos y congresos; también realizó traducciones para el Instituto del Libro, sobre todo de poesía afrocaribeña. Participó en el Encuentro del Centenario de Rubén Darío, celebrado en Varadero (1967) y en muchos otros actos literarios, relacionados con la poesía y la cultura. En 1980 recibió el Premio Nacional de Ensayo "Enrique José Varona" de la Unión de Escritores y Artistas de Cuba por su libro Nación y Mestizaje en Nicolás Guillén, que en 1983 recibió también el Premio Mirta Aguirre; en 1986 recibió el "Premio de la crítica" cubano por Piedra Pulida y en 2001 el Premio nacional de Literatura. A Elogio y paisaje y La Quinta de los Molinos les fue otorgado también el Premio de la Crítica en l997 y 2000, respectivamente. La Universidad de Nueva York le confirió el Premio Yari-Yari de Poesía Contemporánea por el conjunto de su obra en el 2004. En agosto de 2006, durante la VL edición del Festival Noches de Poesía, recibió el Premio Corona de Oro de Struga 2006 de Macedonia ya proclamado el 21 de marzo de 2006, en la sede de la UNESCO, en París, por el Día Mundial de la Poesía. En mayo de 2007, en el marco del XII Festival Internacional de Poesía de La Habana, recibió el Premio Rafael Alberti. posee las Insignias de Oficial de la Orden al Mérito de la República de Francia y la réplica del Machete de Máximo Gómez, entre otros. Es miembro de número de la Academia Cubana de la Lengua desde 1999. Escribió colaboraciones para Unión, Cultura'64, El Caimán Barbudo, La Gaceta de Cuba, Casa de las Américas. Fue seleccionada para la antología Novísima poesía cubana (1962) de Reinaldo Felipe y Ana María Simo. Su obra abarca una gran amplitud de temas. La mitología de la nación cubana y la relación integracionista de los negros con esta nación mediante el mestizaje de culturas españolas y africanas en una identidad nueva, cubana. La mayor parte de su obra apoya el nacionalismo, la revolución y el actual régimen cubano. Además, declara su feminismo respecto a la situación de las mujeres dentro de esta nueva sociedad y la integración racial haciendo a mujeres negras protagonistas centrales en sus poemas. Finalmente, su trabajo también trata la historia de la esclavitud y el maltrato en la relación de Cuba y los Estados Unidos, aunque su obra no está dominada por los temas políticos. Críticos sagaces han hecho notar jocosas observaciones sobre su propia gente, un particular y muy cubano empleo de la ironía y el humor, así como la calidad intrínseca de una poesía sumamente lírica, íntima, espiritual, e incluso erótica, hasta bucólica. Nancy Morejón ha sido traducida al inglés, al francés, al alemán, al portugués, al italiano, al ruso, al polaco y al holandés y es especialmente conocida en los Estados Unidos, donde su obra es muy apreciada y ha sido traducida y reimpresa en numerosas ocasiones. un fragmento lírico.
Ernestina Michels de Champourcin y Morán de Loredo (Vitoria, 10 de julio de 1905-Madrid, 27 de marzo de 1999) fue una poeta española de la Generación del 27. Está en la nómina de Las Sinsombrero. Su poesía es profunda y ligera, suave y contundente: melodiosa. Sus versos, son de fácil y agradable lectura, y en ellos supo expresar certeramente la intensa hondura de su alma. Esto hace que su temática sea muy distinta a la de algunos de sus contemporáneos. En parte de su obra se rememora la poesía de los grandes místicos españoles: Santa Teresa y San Juan de la Cruz; así como la obra de Juan Ramón Jiménez. De hecho, en Presencia a oscuras (1952) utiliza sonetos, décimas, romances y otras estrofas tradicionales de la poesía barroca.
Nora Méndez es una poetisa nacida en El Salvador en el año 1969. Si bien se trata de una escritora joven, su nombre ciertamente no ha pasado desapercibido hasta el momento; sus obras han aparecido en más de una antología editada en varios países, entre los que se cuentan Estados Unidos y Alemania. En este último, una profesora universitaria lleva años encargándose de la traducción de las poesías de Méndez al alemán. Cabe mencionar que ha participado en numerosos festivales poéticos, tanto en su país como en otros puntos de Latinoamérica y Europa. Además, ha sido reconocida como una de las veintisiete figuras más importantes de la lírica salvadoreña en un libro editado en España. Fuera de la escritura, Nora tiene otros intereses artísticos; en la década de los 80 se dedicó a componer canciones para una agrupación llamada Nuevamérica, además de ocupar el puesto de vocalista. Desde el año 2002, Nora ha publicado diversos poemarios, entre los que se encuentran "Atravesarte a pie toda la vida", "La estación de los pájaros" y "Calentura de amor". En más de una ocasión, sus poemas han recibido excelentes críticas y su fuerza como escritora acarrea una gran responsabilidad en una época en la que se valora tan poco la literatura. Nora Méndez (El Salvador, 1969) es una escritora salvadoreña. Graduada en Sociología y Comunicaciones también ha incursionado en la música como intérprete y compositora. Su incursión en el mundo de las letras y la música, tuvo que ver a la vez con su participación política durante la guerra civil salvadoreña (1980-1992). Fue Secretaria General de la Federación de Estudiantes de Secundaria (FES) y participó en los comandos urbanos de las FAL (Fuerzas Armadas de Liberación), brazo armado del Partido Comunista de El Salvador (PCS). Fue capturada por la Policía Secreta de la Policía Nacional en 1989 y puesta a la orden de los juzgados y llevada al Penal de Ilopango ese mismo año. Luego de la firma de los Acuerdos de Paz de 1992, se retiró de la vida pública, reapareciendo en 2002 con su primer libro editado. Durante los años 1980 fue intérprete y compositora del grupo musical "Nuevamérica", participando en conciertos en Centroamérica. En la actualidad ha escrito y dirigido una cantata para el grupo coral-musical "Caterva". Entre los años de 1991 y 1992, diseñó y publicó la página Guanacanto, del Grupo ASTAC, en Diario CoLatino, bajo el seudónimo de Pajarillo Verde, y fue parte del equipo editorial "Sombrero Azul". En el año 2008, compuso la canción “Rufina llora por sus hijos”, con música y arreglos del maestro Carlos Colón, en conmemoración de la única sobreviviente de la masacre del Mozote, acontecida durante la guerra civil salvadoreña. En 2010 realizó los videos de arte "Reciclando el Balam" con música del compositor Manuel Carcache. Entre 2009 y 2012, algunos de sus poemas han aparecido en Giroscopio, una plaquette de poesía experimental editada en Badajoz, España, por el artista Roberto Farona. Ha dirigido y realizado performances colectivas en las calles de San Salvador, tales como Poesía en la calle, 2004, una intervención de dos horas en el tráfico de San Salvador. Repartiendo libros y recitando poesía junto a otros vates en buses, calles y gasolineras con fondo de música clásica en altoparlantes; El Parque de Zapatos, 2010, una instalación colectiva y espontánea de 200 pares de zapatos viejos en la Plaza Cívica del Centro Histórico de San Salvador, para recordar a los muertos de la masacre del entierro de Monseñor Oscar Arnulfo Romero, asesinado en 1980 por escuadrones de la muerte. Asimismo en 2014 organizó y dirigió la performance urbana "El color de la sangre jamás se olvida" en torno al símbolo de la sangre del pueblo como elemento determinante para la construcción del ideario salvadoreño y su instrumentalización por parte de los grupos de poder. Méndez trabaja arduamente en reflexiones sobre memoria, verdad y transformación de los sistemas sociales. Dentro de sus intereses se encuentran la experimentación y el uso de la tecnología, por ello fue de las primeras poetas en utilizar recursos multimedia para sus presentaciones, tales como video, música y fotografía. Ha prologado un par de libros de poesía a nivel latinoamericano.
Luisa Pérez y Montes de Oca (Santiago de Cuba, 25 de agosto de 1837 – La Habana, 25 de mayo de 1922) pasó a la historia con el apellido de su esposo, por eso se la conoce como Luisa Pérez de Zambrana. Fue una poetisa cubana de marcado acento elegíaco. Es una de las poetisas de las que se dice «nació con el don de la poesía» y está considerada entre las mejores de Cuba e Hispanoamérica. A la edad de 14 años compuso su primer trabajo literario y sus versos, que recogió en un cuaderno publicado con la ayuda de los intelectuales que la rodeaban -y admiraban su poesía- en Santiago. Por sus grandes dotes poéticas y su gracia y finura, Luisa fue elegida para coronar a la gran Gertrudis Gómez de Avellaneda en el Teatro Tacón en 1860.
Carmen Matute es una imprescindible poetisa guatemalteca, cuya trayectoria ha sido valorada y recompensada en varias ocasiones, permitiéndole tanto participar de importantes antologías como conquistar prestigiosos certámenes en el plano nacional e internacional. Matute nació en Guatemala en 1944, país en el que ha residido desde siempre. Estudió la licenciatura en Lengua y Literatura Hispanoamericana en la Universidad de San Carlos de Guatemala y desempeña labores de escritora, habiéndose lanzado a esta tarea siendo aún muy joven. Actualmente goza de un especial reconocimiento no sólo en su país sino en otros territorios. Entre sus obras poéticas pueden destacarse "Vida Insobornable", "En el filo del gozo", "Abalorios y Espejismos" y "Ecos de casa vacía"; las mismas han sido traducidas a decenas de idiomas, conquistando a lectores dispersos a lo largo de todo el mundo. De su narrativa mencionaremos su obra más reconocida, "El Cristo del Secuestro". Además, Carmen es redactora de artículos sobre arte y cultura, habiendo colaborado con importantes medios de su país. Su estilo libre y lleno de símbolos cotidianos permite a los lectores acercarse a una poetisa fresca, actual y capaz de transmitir las sensaciones más profundas e inolvidables. Para poder apreciar este rasgo de la lírica de Matute, podemos recomendar la lectura de poemas como "Amado" y "Autorretrato". Refrerencias Poemas del Alma – www.poemas-del-alma.com/carmen-matute.htm
Olga Orozco (Toay, La Pampa; 17 de marzo de 1920 - Buenos Aires; 15 de agosto de 1999) fue una poeta argentina. Estudió en la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad de Buenos Aires, donde se recibió de maestra. Muy joven fue una de las integrantes del grupo literario surrealista Tercera Vanguardia, al cual pertenecían a su vez, entre otros, Oliverio Girondo y Ulises Mezzera. Se caracteriza por una inteligencia sutil que le permite una extraordinaria capacidad para recurrir a los tropos —una característica suya es el uso frecuente y logrado que hace del oxímoron—; también sabe hacer uso de versículos en los que desarrolla una especial y visionaria imaginación pródiga en expresiones, siendo sus temas frecuentes la evocación de la niñez (que asimila con la época del paraíso perdido), la adolescencia (época de la develación) o, en última instancia, el recurso de la memoria en donde el tiempo parece a resguardo y recuperable ante la muerte.
María Zambrano Alarcón (Vélez-Málaga, España, 22 de abril de 1904 – Madrid, 6 de febrero de 1991) fue una filósofa y ensayista, discípula del famoso filósofo José Ortega y Gasset. Nació en Vélez-Málaga el 22 de abril de 1904, hija de Blas Zambrano García de Carabante y Araceli Alarcón Delgado, ambos maestros. En 1908 se traslada con su familia a Madrid, y vive en el Nº 8 de la calle Redondilla. Más tarde, en 1909, la familia se afinca en Segovia donde transcurre su adolescencia.
Amalia Iglesias Serna (Menaza, provincia de Palencia; 1962) es una filóloga, poetisa y periodista cultural española. En los años sesenta se mudó con su familia a Bilbao, donde se licenció en Filología Hispánica por la Universidad de Deusto, y donde se inició en la poesía. Sus comienzos bilbaínos dentro del grupo Poetas para el Pueblo, editores de la revista Zurgai, le llevaron a la publicación de su primer poema. Vivió unos años en Madrid y después en Salamanca. Es una gran conocedora de la obra de María Zambrano. En 2007 fue nombrada Presidenta Ejecutiva de la Comisión Nacional para la Conmemoración del Centenario de Machado en Soria
Celia Viñas Olivella (Cèlia Vinyes i Olivella) (Lérida, 16 de junio de 1915 - Almería, 21 de junio de 1954), autora española que escribió poesía infantil en español y catalán, con una obra breve pero considerada renovadora y clave en el panorama de la posguerra. Su infancia y juventud transcurren en Palma de Mallorca y en Barcelona, donde comenzó sus estudios de Filosofía y Letras, los cuales se vieron interrumpidos por la Guerra Civil, y que terminó en 1941. Entre sus profesores universitarios cabe destacar a Rafael Lapesa, a Ángel Balbuena Prat y a Guillermo Díaz Plaja, que en 1976 se encargó de realizar una antología de la producción poética de la que había sido su alumna para la colección Adonais.
Eunice Odio (San José, Costa Rica, 18 de octubre de 1919 - México, D. F., 23 de marzo de 1974) fue una reconocida poeta latinoamericana. Complementó sus estudios con extensas lecturas, principalmente en el campo de la poesía moderna. Su inquieta búsqueda de nuevos horizontes la llevó a viajar a Nicaragua, El Salvador, Honduras, Guatemala, Cuba y los Estados Unidos. De regreso al país, a principio de los años cuarenta, sus poemas son leídos en la radio, con el seudónimo de Catalina Mariel. De 1945 a 1947 publica poemas en el Repertorio Americano de Joaquín García Monge, en el periódico La Tribuna y en el periódico Mujer y Hogar.
María Josefa Mujia (n. Chuquisaca; 1812 - 1888) conocida también como la Ciega, es considerada una de las primeras poetisas del romanticismo en Bolivia, escribió versos de dolor y de tristeza en la intimidad de su hogar. Perteneció a la época denominada romanticismo en el siglo XIX y destacó a lado de Manuel José Cortés, Néstor Galindo, Adela Zamudio, Ricardo Mujía y Nataniel Aguirre. Ciega a los catorce años y ajena, por tanto, a todas las sensaciones que procura la vista, su exquisita sensibilidad le ayudó a crearse un mundo interior de belleza y de bondad que supo exteriorizar en sus numerosas poesías. Es considerada la primera mujer escritora de Bolivia, tras su independencia.
Adela Zamudio Ribero (Cochabamba, 11 de octubre de 1854 - 2 de junio de 1928) fue una escritora, pionera del feminismo en Bolivia, que cultivó tanto la poesía como la narrativa. Estudió en la escuela católica de San Alberto en su ciudad natal, Cochabamba, y cursó solamente hasta el tercer curso de primaria, porque en esos tiempos era la máxima educación que se le ofrecía a la mujer. Sin embargo, Adela continuó instruyéndose a través de la lectura: acudía a las personas relevantes de la ciudad en busca de libros y otras fuentes de cultura provenientes de España y del mundo entero. A fines del siglo XIX, después de que el Partido Liberal asumiera el Gobierno, logra trabajar como profesora en la misma escuela donde se había educado. Posteriormente, fue directora de la Escuela Fiscal de Señoritas (1905). Al morir fue sepultada en el cementerio de Cochabamba y en su tumba se lee el epitafio que ella misma escribió: Vuelvo a morar en ignorancia estrella libre ya del suplicio de la vida, allá os espero; hasta seguir mi huella lloradme ausente pero no perdida.
Guadalupe Teresa Amor Schmidtlein (Ciudad de México, 30 de mayo de 1918 - Ibidem, 8 de mayo de 2000), conocida como Pita Amor, fue una escritora y poetisa. Aborda en su poesía temáticas como lo son la soledad, el vacío y Dios. Escritos sus textos siempre en primera persona, se observa una clara influencia de Sor Juana Inés de la Cruz, Francisco de Quevedo y Luis de Góngora. Pita Amor no era solo una poeta más, sino que supo ganarse el nombre de musa no sólo para intelectuales, también para políticos y gente del espectáculo. Con una personalidad atrayente e impositiva, con la locura de su amigo Salvador Dalí y los desplantes de María Félix, pero eso sí, con la ecuanimidad de Ricardo Garibay y las extravagancias de Juan José Arreola. La poetisa Pita Amor, la real y verdadera undécima musa.
Concha Lagos (pseudónimo de Concepción Gutiérrez Torrero) (Córdoba, 23 de enero de 1907-Madrid, 6 de septiembre de 2007) fue una editora, escritora y miembro de la Real Academia de Córdoba. Está considerada escritora total, por haber publicado tanto poesía como narrativa, teatro y ensayo.
Carmen Conde Abellán (Cartagena, 15 de agosto de 1907 - Madrid, 8 de enero de 1996) fue una poeta, narradora e intelectual española. En 1931 fundó, junto con Antonio Oliver Belmás, la primera Universidad Popular de Cartagena. Fue la primera académica de número de la Real Academia Española; pronunció su discurso de entrada en 1979.
Ana María Bueno de la Peña, más conocida como Ana Rossetti (San Fernando, Cádiz 15 de mayo de 1950), es una escritora española de teatro, poesía y género narrativo. Ana Rossetti ha creado una obra rica en registros y géneros. Su obra es una mezcla de erotismo, esteticismo y culturalismo. Aunque es muy conocida por su obra poética, también ha escrito textos teatrales, un libreto para ópera (en torno a la figura de Oscar Wilde, estrenada en la Sala Olimpia de Madrid en 1993 y con música de Manuel Balboa), novela, libros para niños y relatos. Esta poetisa gaditana, que revolucionó el panorama literario en la España de los años 80, se encuentra por derecho propio entre los mejores poetas españoles de la poesía española contemporánea.