Miguel de Unamuno

Teresa: 49

Cuando duerme una madre junto al niño
           duerme el niño dos veces;
cuando duermo soñando en tu cariño
           mi eterno ensueño meces.
Tu eterna imagen llevo de conducho
           para el viaje postrero;
desde que en ti nací, una voz¡escucho
           que afirma lo que espero.
Quien así quiso y así fué querido
           nació para la vida;
sólo pierde la vida su sentido
           cuando el amor se olvida.
Yo sé que me recuerdas en la tierra
           pues que yo te recuerdo,
y cuando vuelva a la que tu alma encierra
           si te pierdo, me pierdo.
Hasta que me venciste, mi batalla
           fué buscar la verdad;
tú eres la única prueba que no falla
           de mi inmortalidad.

Piaciuto o affrontato da...
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