Remington

Desengaño

Mas no te engañes, mundo, no te engañes,
igual de bajos somos los artistas,
sobre la misma cama o sobre el fango
de la altivez cortamos nuestras flores.
 
Vestigios de una raza usurera
acostumbrada a regatear con las palabras,
con las memorias, con las entrañas,
somos vulgares casi todo el tiempo.
 
Y nuestra casa es la morada cotidiana
sin divinal aureola ni misterio,
con su ordinario buró, con su estropeado
cuchillo para repartir miserias.
 
Nos hace el agua lo mismo que a la piedra
e iguales musgos recaba nuestra voz,
con su caverna atroz y su alimaña,
con su ultrajante huella sin razón;
nos hace el sol lo mismo que a la yedra
e igual hedor dejamos por ahí.
 
Así, por mucho que te asombre
nuestro intragable garbo,
nuestro irritante boato,
todos tocamos oilo bien,
todos tocamos, por increíble que parezca,
la misma rota y manoseada pandereta.

Publicado originalmente en Revista Óclesis, 2024

https://oclesis.com.mx/2024/04/25/desengano/

Otras obras de Remington...



Arriba