La sexi star de anónima vagina folla con la rutina de las putas, come pollas en hora de oficina, gana más en propinas que en minuta… Se engaña usted si empaña lo que d…

Excepto las de la imaginación había perdido todas las batallas. Un domingo sin fútbol nos contó, vencido, que tiraba la toalla y nadie lo creyó.

Nos enseñaron a tener paciencia nos enseñaron a no andar descalzos nos enseñaron a morir de viejos nos enseñaron a vivir a plazos nos enseñaron a guardar silencio

Tendrías que haber visto el careto… el día de mi primera comunión. Disfrazado de contraalmirante y re… no veas cómo era el cante que iba… Cuando el párroco se inclinó hacia…

Como si llegaran a buen puerto mis… como si hubiera donde hacerse fuer… como si hubiera por fin destino pa… como si encontrara mi verdad prime… como traerse al hoy cada mañana,

Maldito sea el duende que no tengo… el hiato que encontró san Cucufato… la orgía que agoniza cuando vengo, la letra pequeñita del contrato, los australopitecus arrogantes,

Pucela se desvela despeinada después de la cruzada de Sevilla, y, en capilla, Madrid, con la anda… del ocho que no es mocho de Jandil… Martes se llama el Sábado que odi…

Que no falte un buen pisco en mi v… ni un jalisco chingón de despedida… respirar es un lujo transitorio, hay vida más allá pero no es vida. Evitadle al fiambre, ¡qué bueno er…

Se enamoró de mis baladas suburbia… Igual que se enamoran las miopes abogadas defensoras De abyectos criminales. Lejos de mí, colgarme agravios y m…

¿Con qué permiso, gordo fanfarró*, nos amargas la crema catalana? La puta madre que te desparió, ¿qué deuda te cobró la tramontana? Aquí abajo seguimos, Bardagí,

Esta es la canción de las noches p… que se canta al filo de la madruga… con el aguardiente de la despedida por eso suena tan desesperada. Ven a la canción de las noches per…

Un día Los enanos se rebelarán Contra gulliver. Todos los hombres de corazón dimin… Armados con palos y con hoces

Como un duelo del sheriff del duca… contra Billy the Kid, en Almería, como bakunistas exiliados del Chamberí del último tranvía, a contra obligación, a contra danz…

Se peinaba a lo garçon la viajera que quiso enseñarme a b… en la gare d’austerlitz. Primavera de un amor amarillo y frugal como el sol