#Escritoras #EscritoresCubanos #EscritoresHabaneros #PremioCervantes #SigloXX #1953 #PoemasSinNombre
Hombre que me besas, hay humo en tus labios. Hombre que me ciñes, viento hay en tus brazos. Cerraste el camino,
La verdad hace la Fe; y algunas v…
En la casa vacía han florecido roj…
Cuando revuelvo el brazo no estrecho, rompo el lazo. Ya sólo un camino breve busco: El que de ti me lleve. ¡Con qué agua te apagaré!...
Siempre, amor: Por arriba del beso que fué comida de gusanos y de la rosa que se pudre, cada mañana azul, en la caja del m…
Hasta los lirios están sujetos a t…
Sol en el agua de la orilla... Pasa una gaviota: Hemos venido al mar. Y la recién casada está contenta;
Entre tú yo yo van quedando pocas…
Con mi cuerpo y con mi alma he pod… Mi alma era rebelde y, como los do… Pero la hice al fin saltar aros de… Mi cuerpo fue más dócil. En reali… No acerté a hacerlo; pero ahora, e…
No fue nunca. Lo pensaste quizás porque la luna roja bañó el cielo… o por la mariposa clavada en el muestrario de crista…
Que la vida no vaya más allá de tu… Que yo pueda caber con mi verso en… que tus brazos me ciñan entera y t… sin que afuera se queden ni mi sol… Que me sean tus brazos horizonte y…
Al atardecer iré con mi cántaro azul al río, para recoger la última sombra del paisaje mío. Al atardecer el agua
El viajero ha saltado ágilmente a su caballo, pronto a partir. El camino se extiende recto y empolvado hasta el horizonte: y mientras pruebo la resistencia de los arneses y el buen amar...
Te llevaste la lámpara, pero conmi…
He de amoldarme a ti como el río a… He de correr en ti, he de cantar e… Fuera de ti ha de sobrarme el mund… Dentro de ti no ha de faltarme bla… Dentro de ti está todo; fuera de t…