De «Leyes mudas de la mano alzada»
Colores blandiendo la espada de la… Convites acuosos desde el fervor i… Visitas empíricas e inusitadas par… Cubrimiento de primer nivel de las… Insectos demorados en la barra del…
El día de la madre, de mi madre, e… Ella me enseñó a ser lector, y a r…
Desperté, pero el mundo sigue dorm…
el respeto al complejo ajeno
mire usted cómo es la vida ni si quiera soy capaz de pronunci… y existe la poesía que lo hace por… soy un analfabeto que lo conoció l… disculpe usted el atrevimiento
Ser poeta en esta época (en esta vida, en esta era) no tiene mérito alguno (cualquiera podría, a muchos les t… ni don ni gracia
pueden leer como quieran no
No importa cuántas horas pasen entre poema y poema. La poesía no sabe leer el reloj.
lamento destruir sus castillos en… pero yo soy el hombre más rápido d… me lo imaginé ya a usted apuntándo… cuando todavía usted ni el disparo… y lamento destruir mis castillos e…
Voy por buen camino [no sé para dónde voy.
una palabra por vez y
Lo que perdura una vida, es un dilatado segundo. Vemos cuan inútil resulta invertir en contarlo, tocarlo, cuando estamos pisando
—¿Qué haces? —Intento arreglar algo que rompí —¿Juntaste los pedazos? —No. —Entonces aún no necesita arreglo.
—¿Jefe, me da permiso para ir al e… —Ahora no se puede, la producción… —Disculpe jefe. Gracias. Permiso.…
animal de siete cuerpos contaminad… derrotados por la pérdida de sí mi… ojalá haya guardado en un cajón fo… y todas las pruebas de sus triunfo… para cuando sus hijos crezcan