Venid, amigos, a la fiesta mía, a donde el campo grava el sol de r… campo mi sangre en que mi vida aco… árbol mi sangre en que se encarna… Pues mi casa renace en alegría

La prodigiosa banda en la glorieta levanta de pronto el aire del año… y sopla entre las cintas blancas de la esbelta muchacha por la que… Y taciturna, inmóvil, agradable, d…

Caperuza del alma, está en lo oscu… el lobo, donde nunca sospecharías, y te mira desde su roca de miseria,

En medio de una rugiente avalancha… La luz arranca destellos, no, salt… a la pequeña escalinata que mi pad… desde un humilde orgullo, y vuelan en astillas de luz los troncos de…

Entra el blanco mediodía por las abiertas persianas y huyen las sombras livianas al interior de los días. Desciende a las losas frías

El gato duerme en la cocina mientras la lluvia corre afuera. Cien y mil años de penumbra. La tarde sólo un soplo afuera. El gato duerme desde cuándo,

Habiendo llegado al tiempo en que la penumbra ya no me consuela más y me apocan los presagios pequeños… habiendo llegado a este tiempo; y como las heces del café

Un poema no es más que una conversación en la penumbr… del horno viejo, cuando ya todos se han ido, y cruje afuera el hondo bosque…

Un poema no es más que una conversación en la penumbr… del horno viejo, cuando ya todos se han ido, y cruje afuera el hondo bosque; un poema

Qué significa oler, a qué lenguaje pertenece el picor de la cebolla siempre aludiendo a más; y la frag… de amanecer de toda fruta, qué misteriosa promesa nos esconde

Me asombran las hormigas que al ir… tan seguras de sí que me dan miedo porque están donde van sin más pre… y aunque asomos de vida son perfec… si minúsculas máquinas que saben

Mi abuela está sentada: es una jov… de esbelto rostro frágil sobre el altivo cuello: miro inmóv… la pupila en tinieblas que la mira desde un abismo: si volviera

Salta el rey, y los bastos cerrado… lo acometen brutales. Los oros van huyendo en la vasta llanura. Y ha caído la sota funesta junto al buen caballero. La parda

Entonces ya es seguro que estás mu… No volveremos otra vez a verte jugar con el aliento de los hartos al escribir como al desgano: Che, sobre el dinero

Y mientras te inclinabas Impaciente al vacío, interrogando la polvorienta púrpura, vi el sesgo valeroso de la boina,