Mis manos abren las cortinas de tu ser te visten con otra desnudez descubren los cuerpos de tu cuerpo Mis manos

Déjame, sí, déjame, dios o ángel,… Déjame a solas, turba angélica, solo conmigo, con mi multitud. Estoy con uno como yo, que no me reconoce y me muestra mi…

Negro sobre blanco, azul, el gigante grano de polen estalla entre las grietas del tiempo,

Así como del fondo de la música brota una nota que mientras vibra crece y se adel… hasta que en otra música enmudece, brota del fondo del silencio

Se inventó una cara. Detrás de ella vivió, murió y resucitó muchas veces. Su cara

No es el viento no son los pasos sonámbulos del ag… entre las casas petrificadas y los… a lo largo de la noche rojiza Todo está quieto

La plaza es diminuta. Cuatro muros leprosos, una fuente sin agua, dos bancas de cemento y fresnos malheridos.

En duermevela oigo correr entre bu… un incesante río. Es la catarata negra y blanca, las… mundo confuso, despeñándose. Y mi pensamiento que galopa y galo…

El mar, el mar y tú, plural espejo… el mar de torso perezoso y lento nadando por el mar, del mar sedien… el mar que muere y nace en un refl… El mar y tú, su mar, el mar espejo…

Rodeado de noche follaje inmenso de rumores grandes cortinas impalpables hálitos escribo me detengo

Por el arcaduz de sangre mi cuerpo en tu cuerpo manantial de noche mi lengua de sol en tu bosque artesa tu cuerpo

AL ALBA busca su nombre lo naci… Sobre los troncos soñolientos cent… Galopan las montañas a la orilla d… El sol entra en las aguas con espu… La piedra embiste y rompe claridad…

Mudo, tal un peñasco silencioso desprendido del cielo, cae, espeso… el cielo desprendido de su peso, hundiéndose en sí mismo, piedra y… Arde el anochecer en su destrozo;

Contra la noche sin cuerpo se desgarra y se abraza la pena sola. Negro pensar y encendida semilla pena de fuego amargo y agua dulce

Es la hora esperada sobre la mesa cae interminablemente la cabellera de la lámpara La noche vuelve inmensa la ventana