Mis pasos en esta calle Resuenan en otra calle donde oigo mis pasos

A la luz cenicienta del recuerdo que quiere redimir lo ya vivido arde el ayer fantasma. ¿Yo soy ese que baila al pie del árbol y delir… con nubes que son cuerpos que son…

En el azul unánime los domos de los mausoleos −−negros, reconcentrados, pensativ… emitieron de pronto pájaros.

Bajo mis ojos te extendías, país de dunas –ocres, claras. El viento en busca de agua se detu… país de fuentes y latidos. Vasta como la noche,

Tendida y desgarrada, a la derecha de mis venas, muda; en mortales orillas infinita, inmóvil y serpiente. Toco tu delirante superficie,

Aquel joven soldado era sonriente y tímido y erguido como un joven durazno. El vello de su rostro se doraba con el rubor de los duraznos

Mi abuelo, al tomar el café, me hablaba de Juárez y de Porfiri… los zuavos y los plateados. Y el mantel olía a pólvora. Mi padre, al tomar la copa,

En las montañas Nilgiri busqué a los Toda. Sus templos son establos cónicos. Flacos, barbudos y herméticos, al ordeñar sus búfalos sagrados

Amanecemos piedras. Nada sino la luz. No hay nada sino la luz contra la luz. La tierra: palma de una mano de piedra.

Con la lengua cortada y los ojos abiertos el ruiseñor en la muralla Ojos de pena acumulada y plumaje de sangre

Con los ojos cerrados te iluminas por dentro eres la piedra ciega Noche a noche te labro con los ojos cerrados

Rodeado de noche follaje inmenso de rumores grandes cortinas impalpables hálitos escribo me detengo

Si el hombre es polvo esos que andan por el llano son hombres

Sobre las aguas, sobre el desierto de las horas pobladas sólo por el sol sin nombr… van los maderos tristes, van los hierros, la sal y los carb…

Por el arcaduz de sangre mi cuerpo en tu cuerpo manantial de noche mi lengua de sol en tu bosque artesa tu cuerpo