Sonetillo: Pedro Páramo
En Comala, la sombra se desliza,
susurra el eco un nombre en el abismo;
la muerte es vida, y en su espejismo,
el polvo abraza aquello que agoniza.
Madre que espera, nunca se precisa,
la promesa se pierde en su mutismo;
el río calla, eterno cataclismo,
y el aire es fuego que jamás suaviza.
Pedro gobierna un reino de lamentos,
su mando es yugo, su poder ceniza,
en sus palabras nacen los tormentos.
La soledad, de amor hace una brisa,
y entre los muertos tiemblan los intentos
de hallar la paz que el alma necesita.
