Cual hojas secas al viento que surca el mar azul,
Mis besos volarán hasta ti, dulce amigo.
Más allá del horizonte, cruzando los confines,
Que lleguen a tu rostro como caricias de trigo.
Que las olas traslapadas te abrazen con dulzura,
Y el aroma del jazmín repose en tu regazo.
Que el murmullo de las palmas arrulle tus sueños,
Y mi alma se una a la tuya en un eterno lazo.
Que sientas en cada brisa el calor de mis latidos,
Y en cada rayo de sol, mi sonrisa se refleje.
Que el susurro de las aves lleve mis palabras,
Y en cada atardecer, mi recuerdo te proteje.
Aunque mares nos separen, amigo de mi alma,
Que estos besos en el viento acorten la distancia.
Que sientas en cada soplo mi abrazo y mi cariño,
Y en cada rayo de luna, mi eterna confianza.