Épocas y Cortejos
### Cortejo en la Época Clásica
En tiempos de caballeros,
el amor era un edén,
proclamado con desdén
por trovadores sinceros.
Los gestos eran ligeros,
con miradas discretas,
y palabras muy secretas
se susurraban al viento,
forjando en cada momento
promesas claras y netas.
### Cortejo en el Siglo XVIII
En los salones se hallaban,
con bailes y con sonrisas,
las damas con sus camisas
y los galanes galantes.
Las cartas se intercambiaban
con sello y perfume suave,
y en cada gesto, una clave
de pasión y de respeto,
tejiendo un amor discreto
que al corazón siempre cabe.
### Cortejo en el Siglo XIX
Bajo la luz de gas tenue,
los paseos eran arte,
donde el amor, con descarte,
se mostraba en cada tenue.
Los abanicos ocultaban
mensajes de amor sincero,
y con un gesto ligero,
se revelaba el deseo,
que en cada mirada veo
un sentimiento certero.
### Cortejo en el Siglo XX
Llegó la era industrial,
con cartas y con teléfonos,
donde el amor sin enojos
se adaptó a lo actual.
Las flores y los poemas
seguían siendo el lenguaje,
pero en cada nuevo viaje,
se notaba la prisa,
y en cada encuentro, la risa
marcaba un dulce pasaje.
### Cortejo en la Era Digital
Hoy en la era virtual,
el amor se manifiesta
en mensajes y en la gesta
de un clic casi casual.
Las pantallas son el canal
de un cortejo diferente,
donde el alma está presente
aunque sea desde lejos,
y en los amores reflejos,
la pasión sigue latente.
### Reflexión Final
A través del tiempo cambian
las formas del cortejar,
mas el amor, sin cesar,
en el corazón se agranda.
Sea en cartas o en pantalla,
el sentir siempre es humano,
y en cada gesto temprano,
la esencia del amor puro
perdura en el tiempo duro,
uniendo siempre la mano.
Estas décimas espinelas ilustran cómo el cortejo ha evolucionado a lo largo de los siglos, adaptándose a los cambios sociales y tecnológicos, pero manteniendo siempre la esencia del amor y la conexión .
