Es de noche y llegas, Con el silencio de la luna, Los pasos apresurados, La emoción que te acuna. El viento susurra,
Dejando de desear, El corazón se calma, Y en paz puede descansar, Libre de toda añoranza. Ya no más suspiros,
Entre calles borrachas de sueños, y madrugadas que saben a ron, camina un poeta que lleva en el al… el peso sin tregua de cada canción… Con su voz rasgada de humo y quebr…
En cada rincón de este vasto unive… Encuentro reflejos de tu ser inmor… Pues la naturaleza, en su lenguaje… Me habla de ti, amor, de manera ce… El susurro del viento en los altos…
En su celda de piedra y silencio, la monja de sangre gitana suspira. Sus manos, antes libres, ahora bor… sueños de un mundo que ya no habit… La aguja danza sobre la tela blanc…
Te diviso desde lejos Allá, en el litoral Yo siento mi líquido amigo Que te alegra mi llegar. Yo lo sé porque tus olas
Su piel roja y brillante, esconde un fuego ardiente, que abrasa con su pasión. Cada semilla, un deseo, que busca su liberación,
Sobre el monte retumba la gaita, canta el viento con eco en la ría, baila el roble su sombra en la erm… y en la noche resuena la vida. ——
La tarde otoñal, serena y callada, viste al bosque entero de tonos ro… y el sol, ya cansado, con luz apag… dora los caminos con rayos oblicuo… Las hojas doradas, con lento girar…
Derrama el alba su miel dorada, besando pétalos en su danzar, luz que en su piel queda atrapada, como un susurro al despertar. Si su voz calla, el viento es mudo…
Cuando llegan los ángeles, la luz tiñe el cielo, sus alas murmuran al viento, y el dolor se vuelve eco. Las sombras se disipan,
En la vasta voz de mi vacío, sin ti, susurra el silencio, como un eco en la penumbra, como u… Como el sol que se desvanece, como la luna que se esconde,
Entre rocas y espinas florece, cual roble que crece en la torment… nuestro amor, que obstáculos enfre… y ante la adversidad se fortalece. Ni la distancia su fuerza adormece…
En cada trazo de mis versos, se desliza mi amor, sin ceso, a ti, mujer de mi embeleso, mi pluma rinde tributo, confieso. En cada estrofa, te nombro,
Suenan las notas de la gaita, resuena el eco en el monte, voz de mujer que despierta, que alza su canto y responde. Rosalía, madre de versos,