A ti, mi voz, mi arpa adorada, Confío mis secretos, mis anhelos. En tus cuerdas vibran mis sueños, Y tus notas alivian mis duelos. A ti, mi llanto, mi suspiro amante…

En cada aliento te echo de menos, En cada sitio, en cada rincón. En cada instante, mi anhelo esmens… Te extraño tanto, mi corazón. En cada sueño, tu recuerdo enhebro…

En el corazón del laberinto, Donde las sombras juegan con la lu… Se ocultan los ecos de mil destino… Reflejos de un yo que se busca en… Los muros de piedra, antiguos y fr…

Yace la Tierra bajo el cielo gris… Agonizante, herida, desangrada. Sus pulmones se asfixian, su pulso… Mientras la sombra de la muerte se… Las selvas se marchitan, los ríos…

Soy el pulso que brota de la roca… un canto desgarrado que abraza la… El viento en su suspiro pronuncia… y el fuego que me habita es llama… Soy río que desciende buscando su…

En el jardín de las letras hispana… Florece una asociación sin par, Que nutre sueños y palabras, Y da a las voces un hogar. APHF, faro de cultura,

El moro con habichuelas, y el chivo guisado al lado, el chicharrón bien dorado, son delicias que consuela. La bandera que revela

Hoy me desperté con la cabeza llena de ideas y el corazón vacío como un par de zapatos perdidos. La alarma sonó

La Huesuda, aburrida de tanto tra… decidió visitar al político de ava… “A ver si este”, pensó con sorna, “me da algo más que su retórica ad… Llegó a Palacio en su escoba de s…

En la penumbra suave del recuerdo, susurra el viento nombres del ayer… como un rumor que insiste en renac… dejando el alma rota y sin acuerdo… Los días van, la ausencia los gobi…

En la mente danza la tristeza, como sombra que nunca se va, pero en medio de tanta crudeza, la alegría también brillará. Hay días que el alma se siente,

En su celda de piedra y silencio, la monja de sangre gitana suspira. Sus manos, antes libres, ahora bor… sueños de un mundo que ya no habit… La aguja danza sobre la tela blanc…

Tu amor me ha desvelado Que el cariño florece sin igual, A tu lado el tiempo es vano, El fervor en nuestros pechos cabal… El querer que nos une, intenso,

Bajo el cielo estrellado, tu mirad… Resplandece cual lluvia de diamant… Tu belleza, cual rosa deshojada, Ilumina mis noches, mi anhelante. Las Perseidas, testigos de mi pas…

Aquellos que desean bienes ajenos, No saben del valor de lo verdadero… Envidian riquezas sin sentido y di… Ignorantes de los tesoros más llen… La envidia corroe sus corazones pe…