Un ardor que me retuerce
y los músculos se tensan.
Un líquido negro
que al llegar al centro
me dobla a la mitad
como este silencio y este espacio
que nos distancia.
Miro a través de la persiana
e imagino otra época.
Reconstruyo imágenes
en una ruta interminable
y atormentada por el encierro
hablo con vos
y te digo mis pendientes
(sólo en mi mente).
Atiendo mis desventuras
como el camino hacia el alivio
hacia el mundo
y la estrella
que me guían.
Apoyo la cabeza en la almohada
y antes de dormir
elijo una carta.