No es el mar lo que miras, es el reflejo de un nombre sumergido en la orilla. El agua repite su sombra, te llama con su lengua de espuma,

Luz de la noche, testigo callada, susurro eterno de un tiempo perdid… brillabas dulce, con calma dorada, sobre el sendero que nunca he olvi… Tu rostro pleno de plata y de enca…

La poesía no miente, solo muestra… un reflejo en palabras del alma y… Es el grito del aire que no encuen… es la huella del fuego cuando la p… No es ciencia ni oficio, es el art…

Plantaré un bello jardín, que al mar hará parecer, donde el pájaro cante al alba y las estrellas al anochecer. En él alzaré un palacio,

I. Ama con la fuerza de un río en… que no conoce límites ni bordes. II. Escribe en los labios del ser… el lenguaje eterno de lo no hablad… III. Sé refugio cuando la tormen…

El pastel volador Tina y Tomás quisieron hornear un gran pastel para merendar. Pusieron harina, pusieron miel, pusieron un kilo de azúcar también…

Nieve que calla, luces de un portal, la vida estalla en un frío umbral. Voces ausentes,

En la antigua Roma, un ritual se… Lupercalia, fiesta de fertilidad y… sacrificios y danzas, la pasión de… celebrando la vida, el instinto má… Con el tiempo, la fe cristiana eme…

Las luces del semáforo arden verde… como si el mundo quisiera decirme… Pero mis piernas pesan, cemento y sudor, calles que nunca terminan de abrir…

Intro: Las estrellas alumbrando, la campiña y su camino, se escuchan las campanillas, en las noches del Rocío.