De «Leyes mudas de la mano alzada»
Soy poeta y no tengo remedio. Ni quiero tenerlo. Soy poeta, y es irremediable:
Ser poeta en esta época (en esta vida, en esta era) no tiene mérito alguno (cualquiera podría, a muchos les t… ni don ni gracia
Sé que no existe quién me ampare. Me atañe más quién me extrañe. No importa si ella, de la mano, me… por una noche larga, sin fin, sin… etérea, como mi amor por la vida,
—¿Quién es usted? —Eso debería saberlo usted.
una bestia huye de mí y sobrevive yo huyo de otra bestia que sobrevivió
La señal del cosmos se trenza en e… para que yo, grillete último, líe… lo emancipe y lo vislumbre, vuelto un trapo, inmundicia, y con el pesado parpado,
No importa el lado de la puerta que nos vea. El afuera siempre está adentro.
Cuando el poeta se queda solo la tierra tiembla. Tiemblan juntos… No se sabe si por lo mismo o por todo lo contrario.
Hubo un tiempo en que los hombres fueron dioses y dominaron todas las artes y las ciencias de forma misteriosa e inmisericord…
Por personas como tú hay personas como tú.
Soy un animal defectuoso: escribo y leo, pienso y actúo. Pero tengo un problema mayor: el animal preferido de dios es el…
La humanidad vino de un árbol que… La humanidad es una pared a punto… La humanidad, conmigo adentro, es…
No importa cuántas horas pasen entre poema y poema. La poesía no sabe leer el reloj.
Si fuera posible cambiaría de piel a diario. Y si fuera imposible cambiaría de piel a diario.
ya sé que de mejores