#EscritoresAndaluces #EscritoresEspañoles #Generación27
Zarparé, al alba, del Puerto, hacia Palos de Moguer, sobre una barca sin remos. De noche, solo, ¡a la mar! y con el viento y contigo!
Oh tú, mi amor, la de subidos seno… en punta de rubíes levantados, los más firmes, pulidos, deseados, llenos de luz y de penumbras lleno… Hermosos, dulces, mágicos, serenos
(Muerte) A un niño, a un solo niño que iba… para ángel indiferente de una esca… Mirad. Conteneos la sangre, los o… A sus pies, él mismo, sin vida.
Qué lejos por mares, campos y mont… ya otros soles miran mi cabeza can… Nunca vi Granada. Mi cabeza cana, los años perdidos, quiero hallar los viejos, borrados…
Niebla», tú no comprendes: lo cant… el tabaco inocente, tonto, de tu m… los largos resplandores que por el… al saltar, rayo tierno de brizna d… Mira esos perros turbios, huérfano…
Es cuando golfos y bahías de sangr… coagulados de astros difuntos y ve… inundan los sueños. Cuando golfos y bahías de sangre atropellan la navegación de los le…
Dejé por ti mis bosques, mi perdid… arboleda, mis perros desvelados, mis capitales años desterrados hasta casi el invierno de la vida. Dejé un temblor, dejé una sacudida…
«Pasado el primer melancólico invierno, ya contemplando Madrid disuelto en la neblina, bajo la nieve o a la luz de esos cielos tan suyos, tensos de azules congelados; ya consolándome co...
¡Arriba, trabajadores madrugadores! ¡En una mulita parda baja la aurora a la plaza el aura de los clamores,
Antes de ser o estar en el bramido que la entraña vacuna conmociona, por el aire que el cuerno desmoron… y el coletazo deja sin sentido; en el oscuro germen desceñido
La dulzura, el estupro, la risa, la violencia, la sonrisa, la sangre, el cadalso, la feria. Hay un diablo demente persiguiendo
Deja ese sueño. Envuélvete desnuda y blanca, en tu sábana. Te esperan en el jardín tras las tapias.
Las floridas espaldas ya en la nie… y los cabellos de marfil al viento… Agua muerta en la sien, el pensami… color halo de luna cuando llueve. ¡Oh qué clamor bajo del seno breve…
¡Ja, ja, ja! Qué gracioso está mi corazón vestido de smoking rojo ¡je, je, je!
—Un portal. —No lo tenemos. —Por una noche. —¿Quién eres? —La Virgen.
