Los personajes: Ramón Budiño
#EscritoresUruguayos #SigloXX #SigloXXI #1974 #PoemasDeOtros
La primavera frágil / la primavera… pacientemente escucha y atiende mi… con su verde más verde me mira y m… y decide orgullosa que esta vez no… y así / para mi asombro / me quedo…
Sé que algunos hermanos se enmenda… se desfraternizaron / se perdieron… sin apelar a prórrogas decidieron lavarse de mágicas penu… y lejos / en la cueva del olvido
—Usted no es mallorquín, ¿verdad?—dice la adolescente desde la mesa vecina. —¿Cómo? ¿Qué?—se sobresalta Quiñones y casi se atora con el jerez seco. —¿Lo asusté?—La muchacha no p...
En la ciudad de Montevideo, a las nueve horas y cuarenta minutos del día quince de mayo del año mil novecientos ochenta y siete, se reúne el Directorio de Abecé, S. A., en la sala de co...
La muerte se puso una cara de mons… una cara de monstruo horrible esperó y esperó detrás de una esqu… salió al fin de la sombra como un… y el niño huyó más rápido que su p…
Cuando corres al ómnibus y trepas no sabes que noviembre va contigo el punguista noviembre va a quitar… el voto que aún ignoras, ese voto pensarás pensaremos qué trabajo
Aquí está el Palacio Salvo allá está el Victoria Plaza son tan torpes tan horrendos que a uno lo dejan sin habla su fealdad es tan espesa
Tal vez se le olvidó tu santo y se… después de todo no es tan importan… no va a flamear el cielo por su au… ayúdate secúndate solázate búscate en la quimera de los otros
Después de todo es fácil recordar basta con arrimarse al horizonte basta con bostezar en plena eufori… alcanza con entrar en la agonía es fácil recordar
Todo campo es el nuestro por ejemplo está éste verde dispuesto verde los surcos y los surcos
De pronto comenzaron a llorar las criaturas los perros en el ángelus las vírgenes propensas los ancianos a término
No lo harás en vano Ah no lo harás en vano se te helarán los dedos y el corazón y los olores se te helará la noche
Por sobre las terrazas alunadas donde se aman cautelosamente los g… y los brillos esquivan las chimene… creo que nadie sabe lo que yo sé e… algo aprendido a pedacitos y a pul…
A sus treinta y cinco años, Ileana Márquez tenía marido (Dámaso) y amante (Marcos). Saberse querida, o al menos deseada por ambos, no le causaba la menor ansiedad, más bien le otorgaba ...
El marciano llegó en una nave reducida, casi portátil, algo así como un Volkswagen del espacio. Además de su propia lengua, sólo hablaba inglés, pero no el de la BBC sino el de Shakespe...