#EscritoresArgentinos #PremioCervantes #SigloXX #1981 #LaCifra
Superados los círculos del Infierno y las arduas terrazas del Purgatorio, Dante, en el Paraíso terrenal, ve por fin a Beatriz; Ozanam conjetura que la escena (ciertamente una de las más...
Yo dormía en la cumbre y era hermo… Mi cuerpo, que los años han gastad… Alto en la noche helénica, el cent… Demoraba su cuádruple carrera Para atisbar mi sueño. Me placía
En el fondo del sueño están los su… noche quiero perderme en las aguas… que me lavan del día, pero bajo es… aguas que nos conceden la penúltim… late en la hora gris la obscena ma…
Esta novela, más o menos teosófica —El ángel de la ventana occidental—, no es tan bella como su título. A su autor, Gustav Meyrink, lo hizo famoso la novela fantástica El Golem, libro e...
Me acuerdo, fue en Balvanera, en una noche lejana, que alguien dejó caer el nombre de un tal Jacinto Chiclana. Algo se dijo también
Si las páginas de este libro consienten algún verso feliz, perdóneme el lector la descortesía de haberlo usurpado yo, previamente. Nuestras nadas poco difieren; es trivial y fortuita la...
¿Qué habrá soñado el Tiempo hasta ahora, que es, como todos los ahoras, el ápice? Ha soñado la espada, cuyo mejor lugar es el verso. Ha soñado y labrado la sentencia, que puede simular ...
Al término de tres generaciones vuelvo a los campos de los Acevedo… que fueron mis mayores. Vagamente los he buscado en esta vieja casa blanca y rectangular, en la frescu…
Magnus Barfod, en el año 1102, em… Que en tus ejércitos militen el or… Que mafiana, en los campos de mi r… Que tus manos de rey tejan terribl… Que sean alimento del cisne rojo l…
Creo que el ejercicio de las armas es verdaderamente honroso, más allá del hecho de ejercerlo por unas u otras causas. La misión del soldado es algo noble, y sé que al decir esto me ene...
Ni aquella tarde ni la otra murió el ilustre Giambattista Marino, que las bocas unánimes de la Fama (para usar una imagen que le fue cara) proclamaron el nuevo Homero y el nuevo Dante, ...
No hay dos cerros iguales, pero en cualquier lugar de la tierra la llanura es una y la misma. Yo iba por un camino de la llanura. Me pregunté sin mucha curiosidad si estaba en Oklahoma ...
El azar, (tal es el nombre que nuestra inevitable ignorancia da al tejido infinito e incalculable de causas y efectos) ha sido muy generoso conmigo. El azar dice que soy un gran escrito...
¿Qué será Buenos Aires? Es la Plaza de Mayo a la que volv… Es el dédalo creciente de luces qu… Es el paredón de la Recoleta cont… Es un gran árbol de la calle Juní…
Ya se le van los ojos a la noche e… y es como una sequía husmeando llu… Ya todos los caminos están cerca, y hasta el camino del milagro. El viento trae el alba entorpecida…