Tintinean las campanas
que llevan personas
cansadas y hartas
de tantas bobadas.
Tintinean y esconden
los rostros deformes
cuyas imágenes reflejan
el caos y el orden.
Gritan los indígenas de occidente,
los del sur ya no pueden
por falta de pulmones y dientes.
Los que trabajan muerden
el tobillo de los pudientes,
arde la sangre... hierve.