El incesante arrullo del río.
Y una gota que cesa mi llanto.
No me he bañado antes acá,
Pero no hace falta.
Sé que te conozco de tiempos atrás;
Tiempos lejanos que nos vieron más.
No pienso discutir nuestra eternidad,
Ni lo efímero de tus besos aquella noche.
No practicaré el arte de decir que te extraño
Porque me parece extraño intentarlo.
Solo te diré algunas cosas
Para ver si aún me recuerdas.
Solo trataré de olvidar por completo
El rastro que dejaron aquellas rosas.
Sus espinas entraron en mi piel,
Mientras dormía cerca al río.
Tenías un aliento sabor a miel,
Chocaba fuertemente contra el mío.