Mario Benedetti

Estos y otros mendigos

Todo el mundo lo admite
antes no había
y ahora nos asombra que aparezcan
en la calle en el quiosco en las esquinas
concurran a las puertas a los timbres
al olor a churrasco y a café
 
llegan con una extraña dignidad
sin llagas desahuciadas ni muñones
ni infantes de chantaje o de mentira
sin puta vocación de ser mendigos
 
no claman por monedas
acostumbradamente tienen hambre
dicen que pan bocados algo
pero al dejar constancia no se humillan
no pierden el respeto de sí mismos
 
tan sólo tienen hambre y no es vergüenza
decir que pan bocados algo
y mejor todavía si es trabajo
tienen hambruna de faenas
saben que no hay vacantes
pero igualmente están
famélicos de ocio
ansiosos de jornales
vacíos sin embargo de rencor
 
la obstinación la llevan
como si fuera una corbata gris
esas que nadie nota
dicen que pan bocados algo
consuelo no reclaman
sólo al presente aspiran
 
tienen sus opiniones sobre el tiempo
y sobre el fondo monetario
y sobre las virtudes teologales
pero no las prodigan
no desmenuzan nada salvo el pan
si lo tienen
 
hablan lo estrictamente innecesario
para que la abundancia los entienda
no los inscriba en la piedad
dicen que pan bocados algo
el flan puede llegar a ser una quimera
el dulce de zapallo una utopía
la comprensión una galaxia
 
para los ricos de solemnidad
esta gratuita bancarrota es nada
la privación un tris
la penuria una mosca
el hambre una historieta
 
es cierto antes no había
o quién sabe
si no eran otros los menesterosos
los oportunos mendicantes
los pordioseros de poder
 
esos que por la noche flagelaban a escote
para hacer boca y méritos
 
no eran pobres de espíritu
no arrastraban consigo la miseria
sólo eran miserables
y no es poco
 
ésos no piden hoy mendrugos ni disculpas
saben que no hay vacantes
ni en el escalafón ni en la memoria
 
tan sólo sueñan ocasionalmente
que acuden a una puerta
y ésta se abre fantasmal
y alguien una muchacha
dice quiero vivir
quiero otra vez vivir
 
y ellos se mueren de miseria
no tienen más remedio que morirse
sin decir pan bocados algo
sin decir nada hasta que se despiertan
para seguir muriendo
aunque no mueran
Autres oeuvres par Mario Benedetti...



Haut