Pececitos de colores, brillan por doquier. En la superficie del lago quietecitos están ¡Eh! Mirad ahí van.

Carne y sangre nos unen, imperan lazos que nutren, fuiste vida en mi ser, eres ser de mi vida. Luz que me indica el camino,

Te envuelven, dan luz a tu mirada, cuando en una caricia el sol pincela tu rostro. En tu matutino descanso te acercas a su orilla

Canta la Tierra, su latido es savia y brisa, verde susurro que despierta bajo el alba florecida. Cantan los ríos,

Golpean, paso a paso marcando la tierra que no es suya latido que se envuelve entre las manos

Mirar que no admirar dorar que no adorar el pescado entre las llamas flamea… las redes sus manos retocar paredes que tienden a negar

El viento se levanta, limpio y ser… abriendo el horizonte que callaba, en su aliento, un río de virtudes… que fluyen como la primera luz del… La montaña, testigo de siglos, res…

En el cielo luces que son explosivas en la tierra aúllan las sirenas otra brecha se abre

Momento inesperado, un encuentro que delata, un sentir sin etiquetas, una sonrisa que amanece, dos universos que coexisten.

En el valle de la vida más hondo placer, más vivo recuerd… la lluvia abre en su camino los pequeños retoños antes cerrado… En lo más hondo del valle

Estímulos, percibo sensaciones, se cruzan mis neuronas, la música se asoma a mi mirada, fragancia de suave azmicle siente… oler al rojo carmín de tus labios…

El río fluye sin prisa, ni esfuerzo en su corriente, bajo el cielo que no juzga, bajo la luna que no se cansa. La montaña observa en silencio,

Entre las sombras ando embrujado por esa luz tuya, querida en la que me envuelves.

[Introducción con ritmo de chirigo… (¡Que viene la infancia... con tab… [Estribillo] “Mamá, mamá, dame el iPad ya, que sin la pantalla... no sé jugar…