Tú en el alto balcón de tu silenci… yo en la barca sin rumbo de mi dañ… los dos perdidos por igual camino, tú esperando mi voz y yo esperando… Esclavo tú del horizonte inútil,

Quisiera tener sujeta la naranja de la tarde así entre las manos, fresca, sin la piel rubia y brillante, tirabuzón de la luna

Llevabas en los pies arena blanca de una playa desconocida. Por eso cuando a mí llegaste

Mis años compañeros, años míos, inciertos, niños desordenados, al salir del colegio... Ya son dos y son tres,

me gustas porque sabes decir mentiras. Si dijeras verdades no me gustarías. ¡Qué dulce que sabe

Toda mi ilusión la he puesto en la espera de un mañana. ¿Cómo vendrás? ¿Adornado de blanca flor de retama o de flor de pensamiento

Noches sobre la playa: rumor de or… Blanco batir de remos que la sombr… Sobre la barra grande los hachones… y un cuerpo perezoso que en la are… En lo alto de la Isleta el faro g…

Todos los días llama a mi puerta el desconsuelo… Estoy vacía y su eco resuena por todos los rincones de mi vida. Se estremece mi sangre

La tarde tiene sueño y se acuesta en las copas de los á… Se le apagan los ojos de mirar a la calle donde el día ha colgado sus horas