Hay fríos tan terribles que son ca… Fríos que nos carcomen como inmens… Fríos que nos persiguen dormidos y… Y nos ponen un negro temblor en la… Hay fríos tan espesos como carnes…
Recuéstate a mi brazo. La sangre que por mis venas se des… Posee, algunas veces, deliciosos s… Afuera son las cinco de la tarde, Pero en mi alma se han quedado inm…
No acostumbro a decir amo, te amo, Sino cuando el amor me inunda todo Desde los ojos hasta los zapatos. Mi cuerpo es una sola verdad y cad… Resume una experiencia de entusias…
Los lechos son países deliciosos Donde sólo los seres elegidos Se pueden madurar. Desconocidos Se levantan de ellos los esposos Que los dioses protegen: silencios…
¡Qué ganas de llorar sobre la cama… ¡Qué ganas de gritar sobre la almo… ¡Qué ganas de sentir que tú me lla… Como llama una niña abandonada! ¡Qué ganas de decirte en el oído
De tierra fresca eres: en la noche Me hueles a terreno trabajado. Tu olor de tierra en celo se me ac… Y me navega el cuerpo como un barc… Olor a entraña viva, a tierra jove…
La noche, deseosa, apenumbrada, Te quitó sin pensar las zapatillas… Y –por sentirse blanca y alumbrada… Desnudó blancamente tus rodillas. Luego –por diversión, sin decir na…
Mujer, toda mi sangre está present… Contigo en esa lucha que sostienes… Contigo está mi amor incandescente Y en tu llanto y tu duelo me conti… Nunca en la vida estuve tan de pri…
Con toda la esperanza yo te amo, Con todo mi entusiasmo te maldigo, Con todo el peso de mi amor te odi… Con toda mi ternura te abomino. Me confortas lo mismo que un abraz…
Aunque hundamos a puños la tristez… Y cerremos con besos cada herida El amor nos rebosa en la cabeza Como un agua fatal, enardecida. Escondidos detrás de las persianas…
Hay maderas oscuras y profundas Como tus ojos y tus cabellos. Porque tus ojos y tus cabellos son Como maderas profundas y charolada… Hay maderas suaves y livianas
Para este amor que entre ella y yo… Y entre los dos cuidamos y crecimo… Y entre los dos también alimentamo… Un poquito de sangre te pedimos. Corre dulce y alegre por la acera
La ciudad nos envuelve largamente, Como una noche dolorosa. A nuestro lado ruedan los camiones Como brujas agónicas. Una campana se queja a lo lejos de…
Grande es la sombra. Yo la siento enredada en las manos Como una miel espesa. Bajo la sombra no sabemos Si el camino se marcha o si regres…
Después de acomodarse todos los hu… he venido a llamarte con un nombre… se han abierto mis dedos, se han c… y he gritado en la noche: ¡Compañe… Te quiero porque tienes todas las…