hoy me enfrento a la hoja en blanco
como nunca antes.
en este momento
la incertidumbre guía mi mano.
no sé qué plasmar
pero, ¿acaso no es la ignorancia
el lugar de donde brota la transformación?
¿me sentiré pleno si digo que todo lo que sé
es que no sé nada?
a este punto
lo único certero
es que también hay entereza en medio de la nada.
callar, no tener nada que decir,
es sabio,
y mejor si uno mismo se da cuenta de ello.
dicen que con el silencio
el hombre se supera a sí mismo.
¿será el ser silencio
la réplica más efectiva
ante la sed de hacer?