Tu vientre sabe más que tu cabeza y tanto como tus muslos. Ésa es la fuerte gracia negra de tu cuerpo desnudo.

Murió callada y provincial. Tenía llenos los ojos de paz fría, de lluvia lenta y lenta melodía. Su voz, como un cristal esmerilado… anunciaba un resplandor encerrado.

Si yo pudiera viajar hacia la Luna, viajara, pero señor, para averiguar si tiene limpia la cara.

Canto para matar a una culebra. ¡Mayombe—bombe—mayombé! ¡Mayombe—bombe—mayombé! ¡Mayombe—bombe—mayombé! La culebra tiene los ojos de vidri…

En la vieja villa de Plóvdiv, lejos, allá, mi corazón murió una noche y nada más. Una larga mirada verde,

¡Ay, pobre doña María, ella que no sabe nada! Su hijo, el de la piel manchada, a sueldo en la policía. Ayer, taimado y sutil,

¡De qué callada manera se me adentra usted sonriendo, como si fuera la primavera! (Yo, muriendo.)

Látigo, Sudor y látigo. El sol despertó temprano Y encontró al negro descalzo, Desnudo el cuerpo llagado,

A veces tengo ganas de ser un curs… para decir: La amo a usted con loc… A veces tengo ganas de ser tonto para gritar: ¡La quiero tanto! A veces tengo ganas de ser un niño

Camina, caminante, sigue; camina y no te pares, sigue. Cuando pase por su casa

Iba yo por un camino cuando con la muerte di. —¡Amigo!—gritó la muerte, pero no le respondí, pero no le respondí;

Una paloma me dijo que volando sobre Cuba, oyó en un cañaveral esta décima montuna: —Dulce caña me provoca

José Ramón Cantaliso, ¡canta liso!, canta liso, José Ramón. Duro espinazo insumiso: por eso es que canta liso

La policía (paso de alfombra y ojo de gato) mira en la sombra. Vigila el gato.

No me dan pena los burgueses venci… Y cuando pienso que van a darme pe… aprieto bien los dientes, y cierro… Pienso en mis largos días sin zapa… pienso en mis largos días sin somb…