Niño indio, si estás cansado, tú te acuestas sobre la Tierra, y lo mismo si estás alegre, hijo mío, juega con ella... Se oyen cosas maravillosas

En el llano y la llanada de salvia y menta salvaje, encuentro como esperándome el Aire. Giran redondo, en un niño

Del nicho helado en que los hombre… te bajaré a la tierra humilde y so… Que he de dormirme en ella los hom… y que hemos de soñar sobre la mism… Te acostaré en la tierra soleada c…

¿En dónde tejemos la ronda? ¿La haremos a orillas del mar? El mar danzará con mil olas haciendo una trenza de azahar. ¿La haremos al pie de los montes?

El mar sus millares de olas mece divino. Oyendo a los mares amantes mezo a mi niño. El viento errabundo en la noche

Están redimiendo el cobre con las virtudes del fuego. De allí va a salir hermoso como nunca se lo vieron las piedras que eran sus madres

—No te entiendo, mama, eso de ir esquivando las casas y buscando con los ojos los pastos o las mallacas. ¿Nunca tuviste jardín

Ahora vamos a cantar sólo la paloma blanca. Y donosa la azulada. Paloma blanca en cantares, paloma blanca en las casas.

El maíz del Anáhuac, el maíz de olas fieles, cuerpo de los mexitlis, a mi cuerpo se viene. En el viento me huye,