“Mientras pensaba, en mi recamara, despreciada, humillada, violada, inmerecida y con todo lo que termina en ida. Me fui lentamente al Camino del fin, con un caminante ciego quien me ayudaba en aquella alocada caminata.
“Tomando Yo sus manos, no sentíamos livianos, el calor del placer nos hizo sentirnos amados, lo que no sabes querido Lector de esto, es que Yo ya no soy virgen por dentro, de labios locos sí, pero no de pechos, porque ellos, los labios, ya fueron besados por un Filemafobico”.
“Uno de mis fetiches preferidos Son la uñas perforadas por los fil… Bien pintadas, color rojizo, Con un toque de putas al pantalonc… “Preñar mujeres es lo mejor,