Yo escribo poesía con vocación de periodista
Yo escribo poesía con pluma inquieta,
como quien persigue la verdad escurridiza,
como quien desmenuza en cada letra
el eco de un mundo que se improvisa.
No soy poeta de lunas y suspiros,
mi verso no danza en jardines callados,
prefiero el latido de un pueblo herido,
la sangre invisible, los pasos callados.
Aquí no hay metáforas de terciopelo,
hay titulares que buscan justicia,
hay lágrimas secas, promesas al suelo,
y voces que gritan desde la cornisa.
Cada estrofa es un dato sin disfraz,
cada rima un testigo que se rebela,
porque la poesía, cuando es veraz,
es una crónica que el alma desvela.
Yo escribo poesía que lleva urgencia,
que en su cadencia denuncia el olvido,
porque en este oficio, la única herencia
es darle al silencio un verso encendido.
