Un mundo sin fe es viento mudo,
es eco que se pierde en el olvido,
es lágrima sin causa ni sentido,
un río por la arena transcurrido.
Es sombra que se viste de desnudo,
promesa que en la brisa se deshace,
es rayo que en tiniebla no renace,
es tiempo que se fuga sin escudo.
Es como luz que brilla en un abismo,
destello que no encuentra su reflejo,
un grito que se ahoga en sí mismo.
Es alma que se entrega sin espejo,
latido que no tiene ya lo mismo,
amor que se consume sin consejo.