La sabiduría es inteligencia, la astucia no lo es
La brisa susurra en los campos dorados,
canta el viejo roble su eterna canción.
Sabe de inviernos, de tiempos pasados,
no de artificios ni de simulación.
La inteligencia forja senderos de estrellas,
busca verdades en mares sin fin.
No teme al viento, ni al eco que calla,
brilla en las sombras, persiste en su afín.
Mas la astucia, tozuda y fugaz,
se viste de miel, de dulces engaños.
Danza ligera sin rumbo ni paz,
teje promesas que mueren temprano.
El sabio comprende, el necio presume,
el astuto se esconde tras velo sutil.
Mas el tiempo desnuda a quien finge sus luces,
y al fin la verdad lo verá sucumbir.
