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ElidethAbreu

Balada de Rosarillo

 
 
Estribillo
¡Ay, quién pudiera, quién pudiera,
ser libre al viento, como la marea!
Con su vestido, Rosarillo pasa,
y en cada esquina deja su estela.
 
Copla 1
En la Sevilla de calles estrechas,
donde la sombra se esconde al rumor,
Rosarillo lleva su pena a cuestas,
pero en sus ojos arde el sol.
La viruela cruel dejó sus señales,
mas no apagó su donaire real;
ni las comadres, con sus puñales,
logran quebrar su paso triunfal.
 
Estribillo
¡Ay, quién pudiera, quién pudiera,
ser libre al viento, como la marea!
Con su vestido, Rosarillo pasa,
y en cada esquina deja su estela.
 
Copla 2
Se dicen cosas por las ventanas,
se cuentan cuentos en el portal,
que si su risa no es de cristiana,
que si su porte es casi inmoral.
Pero ella sigue, sin ver espinas,
con la cabeza bien alta va,
que en sus mejillas, aunque divinas,
la vida misma dejó su faz.
 
Estribillo
¡Ay, quién pudiera, quién pudiera,
ser libre al viento, como la marea!
Con su vestido, Rosarillo pasa,
y en cada esquina deja su estela.
 
Copla 3
“Hablad, que el río también murmura,
pero sus aguas llegan al mar.
Soy lo que soy, y mi alma es pura,
quien quiera verme, que venga a mirar.”
Así contesta, con aire altivo,
y con un giro desapareció;
las lenguas quedan sin su motivo,
y el viento, sabio, todo calló.
 
Estribillo final
¡Ay, quién pudiera, quién pudiera,
ser libre al viento, como la marea!
Con su vestido, Rosarillo pasa,
y en cada esquina deja su estela.

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