POESÍA JAPONESA
Cierro los ojos sentada en plaza Nueva parece que siento tus labios tímidos tocar los míos. ¡Mi primer beso!
El pétalo albo atrae a la polilla, besa su néctar. En el sendero vagando el lobo blanco,
Recuerdos vienen a mi, del agua fría de esa playa turquesa, donde los besos eran como la arena, infinitos. Cuando llegaba la luna y rozaba
Malditamente enamorada como voy a escribir una poesía, una canción si cada vez que te miro mi mente sufre un apagón.
—Cada vez que te miro, todo mi cuerpo se estremece, las mariposas vuelan, mis piernas tiemblan. —Mi chica, mi amor, cuando miro tu…
La arena sedosa recoge el tributo de la mar una solitaria concha que esconde todos los océanos toda la música de los marineros
Quiero ser tu sumisa quiero ser tu chica mala quiero darte mi vida azótame con fuerza deja tu huella en mí.
Boca de tu boca, fuego de tu fuego… Olvido de tu ser. Y anhelo de tu corazón. Mírame, estoy aquí desnuda para ti
Otea el lobo 1º la nevada del bosque que bella estampa del cielo añil nuboso día de frío y hambre
Ella, era perfecta Un poeta la convirtió en su musa, hizo un poema interminable, y lo enredo en su pelo de oro, ella quemaba por su sonrisa
Déjame llorar por ti hace mucho que te rompiste a mí, me dejaste rota y combatí el mundo se hundió a mis pies, pero como rocas en la mar, yo luch…
Veneno en la sangre me corre como un caballo por las venas, tú me diste esa condena, tú me diste esta maldición y te fuiste.
Cala turquesa con agua cristalinas. Respiro vida. Aquí se bañan en la mar de los sueños.
Tengo el presentimiento de que empieza el momento entre tú y yo. Lava recorriendo mi cuerpo mis manos recorriéndolo
Están las flores en los bosques lluviosos, son alas de hada. Pequeña flor, se vuelve de cristal;