LA PALABRA
¿Es la palabra invento de los hombres,
que eclosiona con luz del pensamiento,
en susurros que brotan de su aliento,
al llamar los objetos con sus nombres?
¿O es milagro de Dios, dado en regalo
al mísero y lloroso caminante,
que transita su ruta suplicante,
por saber que es lo bueno y que es lo malo?
Mas el vate, testigo de los cielos,
del regalo divino hizo herramienta,
para que el hombre en genio transformado
encuentre silenciadas tras los velos
las notas que a buscar Isis lo alienta.
¡Pues sólo en la mudez está el pecado!