EL TONO DE TU VOZ
El tono de tu voz
me dice que me quieres.
¿Por qué lo niegas?
Para qué negarlo, si todo lo tuyo me lo dice:
Tu mirada,
tus gestos,
tu sonrisa.
No sigas mintiéndote a ti misma.
No sigas mintiendo de ese modo,
que de nada te sirve:
Cuando me dices que no, con tus palabras
me estás diciendo que sí, con ademanes.
¡Baja tu puente levadizo!
y entrégate confiada,
que no arrasaré tus propiedades,
ni prenderé fuego a tus fortines.