El Rostro de la Oscuridad
El rostro se oculta tras una máscara rota,
y en sus ojos arde una llama remota.
La oscuridad no es vacío, es un espejo,
donde todo lo perdido se ve en reflejo.
Cada giro del viento trae una promesa,
cada paso adelante, una nueva tristeza.
El rostro sonríe, pero no hay alegría,
solo el eco de un alma que se desvanece en el día.
En su mirada, el pasado se arrastra,
y el futuro se disuelve en la niebla que abalanza.
No hay respuestas, solo sombras que guían,
y la niña, en su viaje, sabe que no hay salida.
