María Conchita

somosAntinomia

Eres roca
 
y yo animal de sangre fría
 
 
me nace romero de las orejas
 
con el que te bañas el cuerpo
 
 
bendita la pradera que nace
 
cuando las pestañas se cierran
 
 
alacrán blanco
 
caracol dormido
 
 
¿a quién me estoy entregando
 
para que me mate?
 
 
Vives transparente
 
en esa parte escondida del estómago
 
 
retuerces: exprimes: desechas
 
carroña de Eva
 
 
somos testimonio
 
y respuesta inconclusa
 
 
¿es que los sueños me dicen más
 
que tu sombra al acariciarme la consciencia?
 
 
Limpias mi esqueleto
 
y te coronas con sus huesos
 
 
espuma negra te sale de los ojos
 
mis pesadillas te eximen en violencia
 
 
la inquietud se arrodilla
 
tu pena me recorre las piernas
 
 
soy víctima de tu ambiente
 
y de mi circunstancia
 
 
vuelvo a la roca
 
animal dormido.
 
 
Eres liminal sueño
 
        y yo precipicio sin catarsis
 
 
el espacio que nos inunda
 
es el hambre más larga
 
 
un árbol muerto de pájaros
 
diciéndose profundo
 
 
     raíz aletargada
 
resolana de mis sueños.
 
 
                 Eres roca
 
              con vocación de arteria
 
 
me dejas correr
 
ebria la línea,             caliente
 
 
     de tu boca
 
           de tu palabra
 
 
que me obliga a voltearme los ojos
 
a nacer ombligo
 
 
¿qué es lugar y
 
qué es un hecho?
 
 
Te anuncias estallando en la niebla
 
exhalando un grito en la boca de la caverna.
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