De «De un marzo los días todos»
tuvieron que inventarse el día de… después de quebrar a medio mundo c… en todo lo que no necesitaban ni el día de ayer ni hoy ni nunca un viernes que fue casi tan negro…
—¿Jefe, me da permiso para ir al e… —Ahora no se puede, la producción… —Disculpe jefe. Gracias. Permiso.…
No me consta que soy yo el que dic… Habrá que ver qué dice la historia y qué la literatura. Y qué yo.
les tengo una invitación muéranse los espero con la parilla encendid… y con cerveza fría
Le lanzo piedras a la luna a dios a mi sombra a todo lo que se mueve. Le lanzo piedras al agua empozada
Uno de los dragones me chamusca la… el otro, simétrico, sabe quién est… llega hasta sus aposentos y se arr… Un dragón, huraño, me renunció mal… impiedoso en la lucha con los caba…
La vida es estratégica y regresa, siempre y sin falta, cuando me estoy muriendo.
No tengo dónde anidar el mundo es cada vez más plano.
—¿Quién es usted? —Eso debería saberlo usted.
Oigo a los pájaros cantar, dejo de escribir el poema…
Adivinaciones vetustas renaciendo… Genios científicos estudiados por… Grandes pasos para la humanidad má… Primer nuevo paso del big bang otr… Consecuencias de la quietud del mu…
nazco de mí lo veo desde la lejanía la sangre asusta a mi sangre la vida consuela a mi vida
En algún lugar sin nombre, sin mapa, estoy esperándome. El lugar es adentro de mí y cada vez se aleja más de donde e…
Juegos de los fuegos artificiales… Rapapolvos amangualados de los uni… Mutismo por miedo a sucumbir indig… Indolencia del régimen con el rest… Fronteras intangibles en la estrat…
La veo acercarse, por mí. Sin traje de gala arrima, sin armas. De albo fulgoroso viste sus negras empresas. La veo cada noche, en mi cama,
