Amanecer
"Tenía muy pocas ganas de morir... Al amanecer era cuando más odiaba la idea de morir..."
Últimos testigos (1985), Svetlana Aleksiévich
Alba,
Tocabas la esquina de mi refugio
Sin alcanzar al rostro que solo hacía
Muecas de dolor y angustia
Sin acariciar a ese cuerpo indispuesto
A buscarte con sus dedos
Tieso, esperándote entre lamentos
Aspirado por un colchón de ruinas
Tragedias y culpas
A gusto en su murria
Viendo cómo aquella enana amarilla
Anunciaba desde el horizonte
Que un día más había muerto.
Crepúsculo,
Agolpaste anhelos en mi ventana
Teñiste esta lóbrega calma con tu arrebol
Trazando un futuro con tus tonos rojizos
Y antes de que otra insufrible noche
Me abrazara con sus chantajes
Avivaste las pasiones que esperaban
Alzarse en armas
O morir de olvido
Motivándolas a poseerme
Obligándolas a obligarme
Dejar de observar mis pies
Para mirar hacia arriba.
Hoy, Alba
Cubres esplendorosa mi refugio
Alcanzando al rostro que solo hace
Muecas de afán y esperanza
Acariciando a ese cuerpo dispuesto
A perseguirte con sus manos
Tenaz, buscándote optimista
Empujado por un colchón de ilusión
Sueños y quimeras
Satisfecho consigo mismo
Viendo cómo aquella enana amarilla
Anuncia desde el horizonte
Que un día nuevo ha nacido.
Encabezado: Amanecer en el castillo de Norham (1845), J. M. W. Turner
