Le pedí la llave del huerto de su boca. —No la tiene nadie —me dijo—. En el amor no voy de flor

Malditos sean los bienes ganancial… los sostenes a guisa de trincheras… los penes con tres puntos cardenal… la meca que divide tus caderas, los que arriman el ascua a las rui…

Esta no es la embajada del reproch… ni el vademécum de lo que perdí, para que llueva, para ser de noche es condición sine qua non to be Or not to be, como intuyó el boler…

Desnuda se sentía igual que un pez… vestirla era peor que amortajarla; inocente y perversa como un mundo… alegre y repartida como el pan de… No quise retenerla, ¿de qué hubier…

Tú decir que si te votan Tú sacarnos de la O.T.A.N., Tú convencer mucha gente, Tú ganar gran elección, Ahora tú mandar nación,

¿Cómo vidriar, tan lejos del teatr… los azulejos de verte y no verte, cómo ser dos en uno (y dos son cua… los vivos que blasfeman de la muer… ¿Qué cuentas de collares, Marepen…

Cuando se despertó, no recordaba nada de la noche anterior, “demasiadas cervezas”, dijo, al ver mi cabeza,

Que no arranquen los coches, que se detengan todas las factorías, que la ciudad se llene de largas noches

¿A quién embaucará tu gorgorito y esa poz de gallito de taberna? ¿La voz? si no te queda ni un hili… y no me hagas hablar de la entrepi… Hazte un favor, dime que estás her…

Pucela se desvela despeinada después de la cruzada de Sevilla, y, en capilla, Madrid, con la anda… del ocho que no es mocho de Jandil… Martes se llama el Sábado que odi…

El primogénito del comisario Florencio Pérez, pulcramente gana su jornal de curtido funcionario y el benjamín nos ha salido rana. Mágina los subleva y los anida,

La noche de Madrid firma postales de ventanas con tedio en cada ojer… zarcillos de bananas tropicales, fulanas de canana en bandolera. La noche de Madrid, a san Vicente

El joven aprendiz de pintor que ay… Juraba que mis cuadros eran su cat… Hoy, como ve que el público empiez… Ya no dice que pinto tan bien como… En cambio la vecina que jamás salu…

Si nos hundimos antes de nadar no soñarán los peces con anzuelos, si nos rendimos para no llorar declarará el amor huelga de celos. La primavera miente y el verano