Renata Ramírez

Extraño ajeno.

A Pedro, que se llama ajeno.

Hola,
A ti el extraño de mi izquierda.
Marcando pasos desentonados
Y a-rítmicos.
Mofando la naturalidad
Y creyendo, a veces
en la magia
De lo que no existe.
 
Eres simple y extraño
Como una forma sin fondo
Como una figura plana y sin rostro.
 
Eres simple,
Y tan ajeno.
 
Te besé, y te he besado.
Más nuestros labios nunca logran juntarse
Y al tocarnos las manos,
La capa de vidrio nos entorpece.
 
¿De qué hablas tú?
Eres extraño ajeno,
Figura de otro mundo
Primera dimensión,
Distantes ojos.
 
¿Quién eres tú?
Qué se supone que representas
Si en las aguas te reflejas,
Y eres blanco como la nada.
 
Aún, después de todo.
Me has dado la pureza,
el padre de mi único
y pequeño amor.
Padre del alma de mi alma.
A través de ti se abrió
la puerta de la felicidad.
 
Hombre, extraño
Desconocido.
Ajeno, hombre.
Enamorado o no,
Ajeno, hombre.
De una sola piel.
Y lengua tiesa.
De ojos de mármol
Y sonrisa dispersa.

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