#EscritoresAndaluces #EscritoresEspañoles #Generación27
Se equivocó la paloma, se equivocaba. Por ir al norte fue al sur, creyó que el trigo era el agua. Creyó que el mar era el cielo
Cuando tanto se sufre sin sueño y… se escucha que transita solamente… que en los tuétanos tiembla despab… y en las médulas arde continua la… las palabras entonces no sirven: s…
Ángel de luz, ardiendo, ¡oh, ven!, y con tu espada incendia los abismos donde yace mi subterráneo ángel de las niebla… ¡Oh espadazo en las sombras!
Nadie sabe Geografía mejor que la hermana mía. —La anguila azul del canal enlaza las dos bahías. —Dime:¿dónde está el volcán
Toca la campana de la catedral. Y yo sin zapatos, yéndome a casar! Donde esta mi velo,
A veces Altair gime largo, tendid… hincada por el viento oscuro que l… agitada en su sima dulce de espumas lentas que la lle… casi a morir sin voz, para salirse
A ti, nocturno, por la luz herido, luz por la sombra herida de repent… arrebatado, oscuro combatiente, claro ofensor de súbito ofendido. A ti, acosado, envuelto, interrump…
Tú mi vida, esta noche me has borr… del corazón y hasta del pensamient… y tal vez, sin saberlo, me has neg… dándome por perdido ya en el vient… Más luego, vida, vi cómo llorabas,
Poema escénico Me aburro. Me aburro. Me aburro. ¡Cómo en Roma me aburro!
«Pálida Sajonia fina, labrada de filigrana. Hoy cubre la nieve alpina tus bosques de porcelana. ¡Qué pulimento acabado!
Mil novecientos diecisiete. Mi adolescencia: la locura por una caja de pintura, un lienzo en blanco, un caballete. Felicidad de mi equipaje
Asombro de la estrella ante el des… de su cardada lumbre en alborozo. Sueña el melocotón en que su bozo Al aire pueda amanecer cabello. Atónito el limón y agriado el cuel…
Es más, estáis de acuerdo con los asesinos… con los jueces, con los legajos turbios de los min… con esa bala que de pronto puede h…
Tal vez, oh mar, mi voz ya esté ca… y le empiece a faltar aquella tran… aquel arranque igual al tuyo, aque… que era tan parecido a tu oleaje. Han pasado los años por mí, sus du…
¡Oh poesía hermosa, fuerte y dulce… mi solo mar al fin, que siempre vu… ¿Cómo vas a dejarme, cómo un día puede, ciego, pensar en tu abandon… .