#EscritoresAndaluces #EscritoresEspañoles #Generación27 (1924) Marinero en tierra
Hombres de mar, eterno buscador que nunca encuentr… en el horizonte azulado del cielo… eternas despedidas, regresar quizá… partes siempre mirando el horizont…
¡Qué revuelo! ¡Aire, que al toro torillo le pica el pájaro pillo que no pone el pie en el suelo! ¡Qué revuelo!
Porque al fin te perdieron fuegos… y humos lentos velaron velaron el castillo, nívea cárcel. donde la rosa olvida sus fantasmas… mi corazón, sin voz, ni batallones…
Creemos el hombre nuevo cantando. El hombre nuevo de España, cantando. El hombre nuevo del mundo,
Cáscaras, trapos, tronchos, cascar… latas, alambres, vidrios, bacineta… restos de autos y motocicletas, botes, botas, papeles y cartones. Ratas que se meriendan los ratones…
A veces Altair gime largo, tendid… hincada por el viento oscuro que l… agitada en su sima dulce de espumas lentas que la lle… casi a morir sin voz, para salirse
De ti, ¿qué será de ti? Cuando te quedes sin mí, ¿qué luz te llevará a ti, qué sombra a mí?
Guerra a la guerra por la guerra.… Vuelve la espalda. El mar. Abre l… Contra una mina una sirena choca Y un arcángel se hunde, indiferent… Tiempo de fuego. Adiós. Urgenteme…
¡Nunca! No lo diré. Más si lo dig… no culpéis a mi lengua, sí al torm… que irresponsabiliza al pensamient… que descuaja al dolor el enemigo. Si un silencio de muerte irá conmi…
Te conocí de niño allá en el campo aquel de Córdoba… jugando entre los álamos y los mai… las vacas de las viejas quintas, l… No te vi más hasta que supe un día
Al color A ti, sonoro, puro, quie… incalculable al mar de la paleta, por quien la neta luz, la sombra n… en su trasmutación pasan soñando. A ti, por quien la vida combinando
Se equivocó la paloma, se equivocaba. Por ir al norte fue al sur, creyó que el trigo era el agua. Creyó que el mar era el cielo
«No vine a ti para alabar la niebla que te difumina ni esa escarcha que te hace entrar en una caja cristalina. Ni vine a ver cómo se clava
A ti, divina, corporal, preciosa, por quien el aura impereceptible o… el suspendido seno de recrea la prefección tranquila de la rosa… .
¡Amor!, gritó el loro (Nadie le contestó de un chopo al… ¡Amor, amor mío! (Silencio de pino a pino.) ¡Amooor!